L D (EFE) En su discurso de bienvenida durante la recepción en el Congreso con motivo del día de la Constitución, Marín recordó que durante esta legislatura se ha abierto una "nueva ocasión" para poder terminar con la violencia terrorista y, por ello, abogó por "volver al entendimiento profundo" entre todos "por muy difícil que se presente el acuerdo en esta materia". "Debemos intentarlo", reiteró el presidente de la Cámara Baja en presencia del jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder del PP, Mariano Rajoy.
Manuel Marín se mostró convencido de que "el esfuerzo de entendimiento" en las cuestiones básicas "será apreciado" por la opinión pública aunque a renglón seguido reconoció que "no es fácil, todos lo sabemos, pero tenemos que intentarlo". "No quiero molestar a nadie. No quiero dar lecciones de nada", subrayó el presidente del Congreso, quien insistió en que hoy, aniversario de la Constitución de 1978, es un día "para la unión de toda la ciudadanía y de todas las fuerzas democráticas".
Tras recalcar que la Carta Magna es la "urdimbre que da consistencia" a la diversidad de España y fue posible gracias a una política "escrita con mayúsculas", Marín defendió que la Constitución siga siendo lugar de encuentro "por encima de las diferencias del momento". "Soy plenamente consciente de los tiempos y los momentos de nuestros debates parlamentarios", dijo Marín, quien no obstante volvió a pedir a las fuerzas políticas democráticas un "esfuerzo de entendimiento" para poner fin a la lacra del terrorismo.
"Respetando el Estado de Derecho, respetando la ley; respetando las decisiones de los Tribunales y no olvidando nunca el sufrimiento de las víctimas, debemos intentarlo. Sobre esas premisas debemos intentarlo", concluyó.
Manuel Marín habló en el Salón de pasos perdidos del Congreso abarrotado de invitados y ante la atenta mirada de Zapatero y Rajoy, el presidente del Senado, Javier Rojo, la presidenta del Tribunal Constitucional, María Emilia Casas, la vicepresidenta primera del Ejecutivo, María Teresa Fernández de la Vega, y los ministros de Justicia, Interior, Cultura, Defensa y Trabajo.
Manuel Marín se mostró convencido de que "el esfuerzo de entendimiento" en las cuestiones básicas "será apreciado" por la opinión pública aunque a renglón seguido reconoció que "no es fácil, todos lo sabemos, pero tenemos que intentarlo". "No quiero molestar a nadie. No quiero dar lecciones de nada", subrayó el presidente del Congreso, quien insistió en que hoy, aniversario de la Constitución de 1978, es un día "para la unión de toda la ciudadanía y de todas las fuerzas democráticas".
Tras recalcar que la Carta Magna es la "urdimbre que da consistencia" a la diversidad de España y fue posible gracias a una política "escrita con mayúsculas", Marín defendió que la Constitución siga siendo lugar de encuentro "por encima de las diferencias del momento". "Soy plenamente consciente de los tiempos y los momentos de nuestros debates parlamentarios", dijo Marín, quien no obstante volvió a pedir a las fuerzas políticas democráticas un "esfuerzo de entendimiento" para poner fin a la lacra del terrorismo.
"Respetando el Estado de Derecho, respetando la ley; respetando las decisiones de los Tribunales y no olvidando nunca el sufrimiento de las víctimas, debemos intentarlo. Sobre esas premisas debemos intentarlo", concluyó.
Manuel Marín habló en el Salón de pasos perdidos del Congreso abarrotado de invitados y ante la atenta mirada de Zapatero y Rajoy, el presidente del Senado, Javier Rojo, la presidenta del Tribunal Constitucional, María Emilia Casas, la vicepresidenta primera del Ejecutivo, María Teresa Fernández de la Vega, y los ministros de Justicia, Interior, Cultura, Defensa y Trabajo.