(Libertad Digital) En un acto electoral celebrado en el auditorio almeriense de Roquetas de Mar y con un tono desconocido hasta ahora, el candidato a la presidencia del PP, Mariano Rajoy, se ha mostrado contundente a la hora de exigir a Rodríguez Zapatero una rectificación por parte de los miembros de su partido, Juan Carlos Rodríguez Ibarra y Felipe González.
Si el presidente extremeño insinuó que la detención de la furgoneta-bomba en Cuenca era un montaje de la Guardia Civil, el ex presidente del Gobierno acusó directamente al Ejecutivo de Aznar de colaborar con la cúpula de ETA. Rajoy quiere una rectificación en toda regla por parte del líder del PSOE. "Aunque sé que no es capaz porque manda tanto en su partido como en Portugal", añadió el líder del PP. De momento, en el Partido Socialista no ha habido rectificaciones directas sobre las declaraciones de ambos políticos, aunque sí una matización a las palabras de Ibarra.
Primero, el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, ha declarado en la Cadena SER que no tiene ningún indicio de que la detención de dos etarras en Cuenca fuera un montaje del PP, y lamentó que se utilice dicha operación contra el PSOE. Por si estas declaraciones pudieran resultar ambiguas, Chaves subrayó que no tenía "ninguna duda del éxito de la acción policial". Respecto a los comentarios irónicos del presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, sobre dicha actuación, Manuel Chaves dijo desconocer si este tenía alguna prueba para haber efectuado esas declaraciones, aunque no quiso juzgar las palabras del presidente extremeño.
Posteriormente, el dirigente socialista Jesús Caldera quiso recalcar que, "siempre que se produce una detención" de un miembro de la organización terrorista ETA, las Fuerzas de Seguridad del Estado contarán con la "más calurosa felicitación" por parte del PSOE. Caldera subrayó que "contra ETA estamos todos, todos los españoles de bien" y reiteró que "no debemos invitarla" a la campaña electoral como, a su juicio, están haciendo el líder de ERC, Josep Lluis Carod Rovira, "por su gravísimo error", y "este Gobierno, utilizando el terrorismo con fines electorales".
Antes que Rajoy, desde el Gobierno ya se habían censurado las declaraciones del presidente extremeño. Así, el vicepresidente primero, Rodrigo Rato, ha señalado que las palabras de Ibarra son "una gran vergüenza" y admitió que le producen desconcierto porque "no sabía que la defensa a Carod podía llevar al PSOE tan lejos". En la misma línea, el ministro del Interior, Ángel Acebes, dijo que los ciudadanos ya están acostumbrados "a las exageraciones y disparates" de Rodríguez Ibarra, y señaló, en declaraciones a Telemadrid, que las palabras del presidente extremeño son "intolerables" porque implican que "todavía" no entiende que en la lucha contra el terrorismo "no se paga un precio por la paz".
Los mandamientos del PSOE en los gobiernos de González
Como ya hiciera el presidente del Gobierno, José María Aznar, en un acto electoral en Tomelloso, Rajoy recordó a Zapatero que la vigencia de sus mandamientos debe ser nueva. El candidato del PP explicó que "el famoso ZP dice 'no mentirás, no robarás'; pero, oiga, y cuándo él estuvo sentado en el Congreso de los Diputados gobernando su partido entre los años 86 y 96 ¿por qué no dijo entonces no robarás? ¿por qué lo dice ahora?".
Y, para completar el argumento, el candidato del PP añadió: "yo garantizo un gobierno honesto, y lo garantizo no con un discurso o afirmación, sino con la autoridad moral que me da el que en 1996 la corrupción era el tercer problema de España y hoy no figura entre los 40 primeros problemas que preocupan a los españoles; por algo será".