L D (Europa Press) Durante un encuentro con representantes de Nuevas Generaciones en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, Rajoy recordó que "mucha gente" le ha trasladado su respaldo y su apoyo y defendió que "los adversarios políticos" del partido están fuera de él. "Por tanto, debemos hacer un esfuerzo y debemos ser conscientes de que no se debe hablar mal de ningún compañero del partido, aunque se pueda equivocar, porque todos nos podemos equivocar", subrayó.
"El gran éxito de este partido es que hemos sido capaces de convivir", defendió tras explicar que tratará de "integrar" a "las distintas formas de ver la vida" que hay en España porque "eso no es malo". Rajoy destacó así la necesidad de "seguir sumando" para conseguir alcanzar los "doce millones" de votos en las próximas elecciones generales.
El líder del PP recordó que la historia del partido es la de "la suma continua" y explicó que ese es su objetivo en este momento, "que cada vez más españoles confíen en el PP". Por ello, manifestó su deseo de "poder representar a muchos más españoles" y recordó que ya en el año 1989 se tomó la decisión de "abrir el partido" para integrar a personas que "piensan distinto" pero coinciden en "las ideas y principios".
"Se incorporó a mucha gente, fue muy importante y se vieron los resultados –argumentó–. Esa es la línea que tenemos que seguir, sumando cabe mucha gente y tiene que caber mucha más en el futuro". A su juicio, la historia "ha demostrado" que "si se hacen las cosas bien, se hace un esfuerzo y te abres, la gente de puede apoyar".
Un PP "flexible"
El líder del PP explicó que este objetivo de integrar a personas "con diferentes formas de ver la vida" exige ser "flexibles", lo que, según enfatizó, "no significa no tener principios". Así, apuntó que la sociedad "no es monolítica", lo que evidencia que "cuanto más abierto sea un partido sin renunciar a sus principios más posibilidades tendrá".
"Como la sociedad no es monolítica debemos actuar en consecuencia", insistió, para explicar a continuación que los votantes "populares" piensan lo mismo "en lo fundamental" pero que en el partido "caben todos". "La sociedad no es monolítica y tampoco el PP es monolítico, malo sería", reiteró.
Rajoy resumió su objetivo principal en "mantener los principios, seguir sumando y abrir el partido a todo el que se quiera sumar", y recordó que los ejes fundamentales del PP son la libertad, la igualdad, la cohesión y solidaridad entre personas y la defensa de la derrota del terrorismo y el rechazo a la negociación política. Además, apostó por la unidad constitucional y manifestó su apoyo al modelo autonómico que, según indicó, ha dejado un balance "bueno" durante estos años.
Durante su intervención, el líder del PP argumentó que el partido debe ser "dinámico" y, como tal, debe saber "adaptarse a la realidad, que es cambiante". "Si uno no se adapta a la realidad corre el peligro de que se le lleve la corriente y darse cuenta de que detrás de él no hay nada", aseveró.
En este sentido, explicó a los jóvenes de Nuevas Generaciones que nunca se está en posesión de "la verdad absoluta" y "cuando pasa el tiempo te das cuenta de que las cosas no son tan fáciles", y reconoció que él es consciente de que se equivoca "muchas veces", por lo que la vida es "un constante proceso de aprendizaje y se debe intentar mejorar".
El líder del PP defendió además que es "absolutamente capital" tener un partido "sólido y unido". "La unidad del partido es un presupuesto indispensable para ganar las elecciones –continuó–. Lo que es compatible con un partido dinámico". Por ello, insistió en que el único objetivo del PP es "ganar las elecciones".
Además, también señaló que los principios no son sólo los que se citan más habitualmente como la defensa de la libertad o la unidad de España sino que se trata de "normas que inspiran la actuación de las personas", algo que, a su juicio, será "mucho más importante en el futuro". Así, enfatizó que "los retos y desafíos" son distintos en cada momento "y van cambiando", así como "las preocupaciones y prioridades cambian con el tiempo".
El "cuento chino" de los 400 euros, única crítica al Gobierno
Por último, se refirió a la situación económica y diferenció entre las actuaciones "urgentes" que se deben acometer para atender a las familias españolas y las acciones destinadas al medio y largo plazo. Criticó la "no política" del Gobierno y puso como ejemplo la ayuda de 400 euros, un "cuento chino" que, según criticó, "se da a quien más dinero tiene".
Rajoy indicó que durante los pasados cuatro años el Ejecutivo socialista "no hizo barbaridades" respecto a la política económica porque "no se hizo nada", pero advirtió de que las bases para el futuro "no son buenas". "Estamos en un mundo muy global y abierto y España para competir necesita personas", concluyó.