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Rajoy y Zapatero convierten la sesión de control en un adelanto del Debate sobre el Estado de la Nación

La sesión de control de este miércoles parecía un anticipo de lo que será el Debate sobre el Estado de la Nación. Tras la reunión de Rajoy y Zapatero del pasado lunes, no había ningún tema concreto que tratar. Ahora es tabú mencionar palabras como "ETA" o "terrorismo" y se buscan circunloquios que no hacen sino alejar el debate.

La sesión de control de este miércoles parecía un anticipo de lo que será el Debate sobre el Estado de la Nación. Tras la reunión de Rajoy y Zapatero del pasado lunes, no había ningún tema concreto que tratar. Ahora es tabú mencionar palabras como "ETA" o "terrorismo" y se buscan circunloquios que no hacen sino alejar el debate.
(Libertad Digital) Mariano Rajoy no preguntó sobre terrorismo, sino que hizo un repaso a toda la legislatura preguntado al presidente por sus proyectos hasta las elecciones. "Ha generado muchos problemas y roto algunos consensos básicos", indicó, dudando de su capacidad de cumplir "los acuerdos" a los que llega. "Se olvidó de lo que más importaba a los españoles, de la competitividad de la economía, de la productividad, del poder adquisitivo de los salarios", señaló, sumando a esto una "política de inmigración criticada por todos".  También arremetió con su gestión en educación y en exteriores. "Quedan pocos meses para el fin de la Legislatura y poco puede hacer --preguntó--. ¿Va a rectificar esta forma de actuar, que sería beneficioso para España?".
 
Zapatero le respondió que el Ejecutivo seguirá cumpliendo el programa electoral y de investidura "en todos aquellos aspectos que afectan al crecimiento de la economía, del empleo, a la extensión de derechos y libertades, a la ampliación de las políticas sociales y a la fortaleza de España, que es lo que sucede en estos tres años de gobierno del PSOE".
 
Rajoy le echó en cara que no había dicho nada y le pidió cosas concretas. "No cree más problemas de los que ha creado a lo largo de la Legislatura", comenzó. Luego, le reclamó prohibir las "regulaciones masivas" en materia de inmigración; no aprobar el Real Decreto de Bachillerato; y le instó a hacer los convenios con las autonomías sobre la Ley de Dependencia y a aplicar la norma.
 
"En materia de violencia de género, donde los resultados no han sido los que todos esperábamos, tome medidas más eficaces para proteger a las mujeres", indicó. A renglón seguido, pasó a la política exterior y le pidió que no "levante" las sanciones a Cuba y apoye a los disidentes; así como que recupere "la posición tradicional" en cuanto al conflicto del Sáhara. A ello sumó una demanda para que no "autorice" una "nueva subida de la luz" y le instó a retirar la Ley de la Memoria Histórica. En ese punto, hizo una alusión a ETA: "Le pido que haga aquello a lo que se comprometió el lunes, a luchar con eficacia contra el problema más importante que tienen los españoles". "Si quiere, lo puede hacer", apostilló. A cada una de estas peticiones respondía la bancada socialista: "¡Halaaaaa!".

El presidente del Gobierno le respondió citando sus "objetivos" para lo que queda de Legislatura: Llegar a tres millones de puestos de trabajo creados en esta Legislatura; que la tasa de paro esté por debajo del "8 por ciento"; que la población ocupada femenina alcance 8 millones de mujeres"; y que se mantenga la proporción de que "2.700 empleos se conviertan de precarios a estables".
 
También apostó por hacer definitiva, "por Ley", la aprobación del Estatuto de los trabajadores autónomos. Prometió poner en servicio 530 kilómetros de nuevas autovías y 400 de AVE. Señaló que se aprobará el Plan de I+D+I 2008-2012 y la Ley de la Sociedad de la Información; y que de aquí a final de la Legislatura se logrará que 400.000 personas dependientes tengan "apoyo y asistencia". Otros objetivos fueron los de aprobar "una estrategia para la salud y la prevención laboral en el trabajo", una "ley de empresas de inserción social y una gran estrategia nacional contra el cambio climático". "Si esto le parece mal, es que no sabe qué le interesa a España y a los españoles", remachó Zapatero.
 
Ángel Acebes retomó la respuesta de Zapatero a Rajoy, y antes de formular su pregunta a De la Vega, comentó que el presidente "va a hacer en cinco meses lo que no ha sido capaz en tres año y medio, a lo mejor de da tiempo". El secretario general del PP criticó la Ley de Memoria Histórica que se está tramitando, "una de las pocas cosas" que ha hecho el Gobierno dijo Acebes y sólo ha generado "división y enfrentamiento" entre españoles. Para Acebes es un "torpedo en la línea de flotación de la convivencia" y "nunca antes un Gobierno hizo de la división el eje de su política, alimentando el enfrentamiento y menos aun mediante la revisión sectaria" de la historia.
 
Por último, recordó que "el viernes se cumplen 30 años" del pacto de la Transición y "es incompatible celebrar ese gran pacto de la concordia y la convivencia y al mismo tiempo tramitar la ley que rompe se pacto" por lo que pidió al Gobierno que retire la Ley de Memoria Histórica.
 
Pero De la Vega ignoró la pregunta de Acebes, y repasó los "éxitos" del Gobierno, entre los que citó "la atención a quienes sufren desastres naturales". Sólo al final se refirió de la Ley de Memoria que dijo que pretende "extender derechos a quienes sufrieron las consecuencias de la guerra civil y del fanquismo" y que no genera "división sino reparación". Ante esta respuesta, Acebes le dijo que "se ha equivocado de folio, ese era el de la pregunta del señor Zaplana".
 
Zaplana repasó los proyectos más relevantes de este Gobierno. En concreto, recordó que la Ley de Violencia de Género iba a ser, según Zapatero, "un poderosos instrumento" y para De la Vega "un paso de gigante", cuando la realidad es que "en 2005 murieron 60 mujeres, 68 en 2006 y en los pocos meses de este año ya son 35".
 
En inmigración, recordó Zaplana, la regulación masiva y el "efecto llamada" que se ha traducido en más cayucos e inmigrantes muertos. La tan cacareada por el Gobierno Ley de Dependencia se resume para Zaplana en que "no hay ni una sola persona dependiente que haya recibido un solo euro, esto debe ser la ampliación de derechos sociales que dice Zapatero".
 
Respecto a la economía, Zaplana criticó que mientras el Gobierno coloca a "sus amigos" en los "órganos reguladores" se dedique a "jugarse el dinero en bolsa las pensiones de los españoles", y se preguntó "qué habrían hecho ustedes de coger un país con el 20 por ciento de paro y con la seguridad social en quiebra".
 
Por último, Zaplana dijo que "en el 96 los españoles ya superaron una situación similar", y le espetó a De la Vega: "Ya sabe como la superaron, como ahora votaron al centro derecha".
 
La respuesta de la vicepresidenta del Gobierno, en su línea, se limitó a vanagloriarse de los supuestos éxitos de este Gobierno, y a criticar al PP del que dijo que "han votado en contra de todos los temas que benefician a la gente", que De la Vega entiende que son la ley del suelo, de igualdad, matrimonio de homosexuales, dependencia...  
 
Dijo que el Gobierno se ocupa de "la violencia de género" con "medidas concretas" aunque reconoció la gravedad de la situación. También dijo que "hoy tenemos menos inmigración irregular, más integración y más derechos". La sorpresa llegó cuando utilizó unas palabras grabadas por EFE sin permiso a Rajoy . Con un victimismo sobreactuado dijo que "la otra" es la vicepresidenta del Gobierno" y "deberían guardarse un poco esa misoginia que empieza ser recalcitrante y tener un poco más de educación y respeto institucional". 
 
Marcó el debate la anécdota protagonizada por Rajoy y Zaplana por la mañana captada por un micrófono indiscreto en el que ambos reconocían que sus preguntas eran "absurdas".

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