Un 55% no apoya con rotundidad el paro, un 18% lo duda, pero creen que finalmente tampoco lo harán. Y tres de cada cuatro encuestados rechazan que Zapatero y Rajoy repitan como candidatos.
Ese 9% era un 15% hace tan solo unos meses. Y el porcentaje de los que probablemente la harán se mantiene en el 13%. Hace dos meses el 50% tenía claro que no lo haría y ahora el número ha ascendido hasta un 55%. Otro 18% dice que probablemente tampoco. Si los motivos para hacer una huelga general no han desaparecido, y de hecho, han aumentado, ¿qué es lo que ha ocurrido?
Aunque crece el malestar por la crisis y el pesimismo general, según el sondeo de Metroscopia para El País, el Gobierno podría ganar el pulso a los sindicatos si estos datos se materializan. El malestar se ha aplacado debido a las vacaciones de verano, y si la tendencia no cambia, a tres semanas de la protesta sólo un 9% tiene claro que participará en la misma.
El País interpreta los datos como que los españoles no creen que ningún político actual les vaya a sacar del bache. Y la fidelidad de los votantes del PP hace que Rajoy consolide, un mes más, su amplia ventaja respecto a expectativa de voto. El tiempo, parece, juega a favor de Zapatero a la hora de enfriar el malestar. Y eso que el decreto de la reforma laboral ya en vigor desde hace dos meses y la ley a punto de salir de las cortes, por lo que se acaban las posibilidades para suavizar el texto y dejar sin excusa a los sindicatos.
La impresión es que se ha instalado una cierta resignación, porque el 76% mantiene que aún queda mucho para que empiece a mejorar la economía mundial y el porcentaje sube al 86% en lo relativo al pesimismo sobre la economía española.
El 58% cree que el Gobierno de Zapatero ha perdido por completo su capacidad para gestionar la crisis. Y el 42% de los votantes del PSOE mantiene esta posición crítica. Y el 77% cree que el PP no lo haría mejor. Pese a que mejora algo la percepción sobre la situación política, la impresión de la clase política es desastrosa.
Pese a ello el PP se va distanciando sobre el PSOE en estimación de voto, con un 41,8% frente al 32,9% respecto a la anterior encuesta hace un mes. Y el PSOE, a su vez, baja ligeramente. De modo que los ciudadanos ya amenazan, según El País, con castigar al Gobierno en las urnas, por mucho que no tenga intención en lanzarse a la calle el 29 de septiembre.