Soraya Sáenz de Santamaría y María Dolores de Cospedal, en calidad de portavoz del PP en el Congreso y de secretaria general del partido, han evitado en todo momento entrar en el fondo de la renuncia de Manuel Pizarro, que el viernes anunció que dejaba su acta en la Cámara Baja.
"Es una renuncia que se enmarca en el ámbito de los personal y no la voy a comentar", apuntó Cospedal, a preguntas de Libertad Digital, en la rueda de prensa posterior al Comité de Dirección de la formación. Acto seguido, la número dos de los populares elogió su "magnífica trayectoria personal y política" e hizo público su reconocimiento "por la labor realizada".
En términos parecidos se pronunció Sáenz de Santamaría, en declaraciones a Antena3. La portavoz popular se limitó a decir que ha aprendido mucho de él durante este tiempo de legislatura y ha asegurado que ha sido un "lujo" contar con su experiencia y asesoramiento, extremo que ha agradecido.
El mismo viernes, fuentes de la cúpula del PP ya informaron a este periódico que ningún dirigente del partido entraría en el fondo de su renuncia y que no se escucharía "ni una mala palabra" del ex presidente de Endesa.
Manuel Pizarro fue fichado por Mariano Rajoy para ir de número dos en las listas del PP en las elecciones de 2008. Fue presentado inicialmente como el fichaje estrella por su demostrada solvencia económica durante la dura batalla para salvar Endesa. Sin embargo, tras perder las elecciones el PP fue relegado al cargo de portavoz del PP en la Comisión Constitucional del Congreso.