(Libertad Digital) Toda la prensa, sin excepción, ha desmontado este jueves la versión ofrecida por el fiscal General del Estado, Cándido Conde Pumpido, para justificar la salida de Eduardo Fingairiño de la Audiencia Nacional.
El primero, el diario El País: "Conde Pumpido obliga a renunciar al fiscal jefe de la Audiencia Nacional". Eso sí, el periódico del Grupo Prisa dice que la decisión se debe a la "pérdida de confianza". Según sus fuentes, "en los últimos meses se habían agudizado los desencuentros entre Conde Pumpido y el fiscal jefe de la Audiencia Nacional, dada la acusada personalidad con la que este último dirige la Fiscalía Antiterrorista y los sucesivos incumplimientos por Fungairiño de las instrucciones del fiscal general".
"Conde Pumpido depura a Fungairiño para facilitar la negociación con ETA", precisa El Mundo, que en un durísimo editorial denuncia "una depuración despótica que humilla a todos los demócratas".
Este diario coincide con la información desvelada el miércoles por la tarde por Libertad Digital y cuenta que Pumpido citó a Fungairiño en su despacho "para exigirle que firmara su carta de renuncia voluntaria al cargo si no quería ser objeto de un expediente disciplinario". Además, le exigió que tomara la decisión en el acto, "probablemente para impedir que Fungairiño reflexionara sobre la encerrona que le había preparado". El Mundo recuerda que "Fungairiño era la persona que mejor simbolizaba la resistencia al chantaje de ETA en el sistema judicial español".
El diario ABC también señala que "Pumpido obliga a dimitir a Fungairiño" aunque en el titular le califica como "el fiscal más díscolo con el Gobierno". En su editorial, la cabecera de Vocento denuncia que se haya "desfigurado" la Audiencia Nacional y atribuye la renuncia de Fungairiño al deseo del fiscal general del Estado de ponerle fuera de la Audiencia Nacional para "neutralizar" la Fiscalía de este tribunal "en un momento político adverso a la firmeza legal contra ETA y sus terminales".