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Un alto el fuego sincronizado con la retirada de escoltas

Decenas de ex cargos públicos vascos y navarros se quedarán este lunes sin escolta. Se les informó de ello la pasada semana, aunque telefónicamente. Esta medida coincide con el anuncio de alto el fuego. ¿Casualidad, coincidencia o sincronización perfecta?

Decenas de ex cargos públicos vascos y navarros se quedarán este lunes sin escolta. Se les informó de ello la pasada semana, aunque telefónicamente. Esta medida coincide con el anuncio de alto el fuego. ¿Casualidad, coincidencia o sincronización perfecta?

Este domingo, a través de un video-comunicado remitido a la BBC, la cadena de televisión pública del Reino Unido, la organización terrorista ETA anunciaba un alto el fuego que no podrá ser verificado por agentes internacionales. Lo hace tras meses de filtraciones interesadas sobre supuestos cambios reales en el seno de Batasuna, tras meses de oscuros trabajos por parte de mediadores internacionales a los que el nacionalismo vasco califica de prestigiosos, y tras múltiples denuncias de nuevos contactos entre el Gobierno Zapatero y ETA para continuar la primera fase de la negociación.

Precisamente, tras meses de chismes, dimes y diretes, y toda clase de rumores sobre la posibilidad de que la banda criminal emitiese un comunicado como el que finalmente ha hecho público este domingo –primero se hablaba del mes de junio, después del próximo mes de octubre–, resulta que el mismo coincide con una exactitud pasmosa en el tiempo con la última polémica decisión del ministerio del Interior y la consejería vasca de la materia: elaborar un plan de reajuste en los servicios de escolta que conlleva, en la práctica, la eliminación de estos servicios a decenas de ex cargos públicos vascos y navarros.

Y es que la pasada semana decenas de ex ediles, ex junteros, ex diputados y ex cargos orgánicos de partidos constitucionalistas en Navarra y la comunidad vasca comenzaron a recibir llamadas telefónicas en las que se les informaba del plan de reajuste llevado a cabo por Alfredo Pérez Rubalcaba y Rodolfo Ares. Según el mismo, los ex cargos públicos que en la actualidad contaban con dos escoltas y un vehículo pasarían a tener tan sólo un escolta. En el caso de los que tenían tan sólo un escolta, dejarían de tener el servicio de escolta que les protegía hasta ahora.

El número exacto de personas a las que afecta este reajuste se desconoce, aunque fuentes populares consultadas por Libertad Digital cifran en unos cincuenta el número de miembros del PP vasco afectados por la medida. A esto, habría que añadir políticos de otros partidos constitucionalistas (PSE, PSN, UPN, CDN o PPN).

El ministerio del Interior y la consejería vasca de la materia han dicho que esta medida sólo se ha tomado tras un análisis pormenorizado de los riesgos de cada afectado, tras consultarlo con los propios afectados, y que mayoritariamente recae ex cargos que se han alejado o retirado ya de la actividad política o que se han trasladado a vivir a otras comunidades autónomas. Pero estos argumentos han sido negados por algunos de los afectados, que no sólo no han sido consultados sino que están preparando ya alegaciones contra esta medida que remitirán al propio ministerio, tal y como, además, se les ha recomendado extraoficialmente desde las Fuerzas de Seguridad.

¿Casualidad, coincidencia o sincronización perfecta? Para estos ex cargos públicos, este domingo, el mismo en el que ETA ha hecho público su comunicado, será el último día en el que dispondrán de su servicio de escolta sin recortes, porque este lunes 6 de septiembre se hará efectivo ya el recorte en estos servicios de seguridad.

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