Es curioso porque con la suma de PSOE-IU no alcanzarían los votos del Partido Popular, pero el Partido Popular no podría gobernar al disponer PSOE e IU de mayoría de diputados en el Parlamento andaluz.
El PP obtendría según Cadpea el 45,4% de los votos, 9,2 puntos por delante del PSOE, que conseguiría el 36,2% de los escrutinios. Pero el partido ganador, para poder gobernar y superar la barrera de los 55 escaños necesarios para disponer der la mayoría absoluta, única mayoría suficiente para el PP, debe conseguir un 48% de los votos escrutados para alcanzar la mayoría absoluta. O sea, que el PSOE seguiría gobernando con el apoyo de IU de cumplirse estos augurios.
Por tanto, el PP está a tres puntos de la mayoría absoluta real con un crecimiento de tres décimas respecto de la oleada del verano del Egopa. El PSOE cae dos puntos. Tres de cada diez andaluces, el 30,9%, tiene ya decidido que votará al partido de Javier Arenas, mientras que el 23,8% votaría a los socialistas. El número de personas que no saben o no contestan cuando se les pregunta por su intención de voto asciende a un 27,7% del electorado. El viento de cambio está aún más asentado cuando se pregunta por la intención de voto en las generales. El 33,5% tiene decidido votar al PP frente al 22,9% que optará por el PSOE, pero hay un 25,3% de indecisos.
El dato, que era ya intuido por muchos socialistas, es que la figura de Zapatero daña el voto socialista. El 79% confía poco o nada en la capacidad del Gobierno para sacar a España de la crisis. El 66,4% cree su gestión perjudica los intereses del PSOE-A mientras que un 37,5% piensa que Rajoy beneficia la proyección de Arenas en su carrera de fondo hacia el Palacio de San Telmo.
Arenas es el líder político más conocido de Andalucía con un 90,3% frente al 76,7% que conoce a Griñán, que va subiendo poco a poco. A Diego Valderas (IU) le conoce un 48,2% y a Pilar González (PA) un raquítico 17,9%. Sin embargo, el PP debe tomar nota de que los candidatos de las principales fuerzas políticas andaluzas suspenden incluidos Griñán (4,56) y Arenas (3,98), una valoración muy baja que indica a las claras cómo ha sido de profunda la vacunas antiPP y anti Arenas suministrada por el régimen socialista desde hace décadas. De hecho, la política como dedicación profesional es citada por uno de cada cuatro andaluces como el primer problema de la región.
Y,no se olvide que la mitad de la población andaluza, sigue pensando que es el PSOE el que finalmente ganará las elecciones andaluzas movilizando a ese electorado que hoy manifiesta que no sabe o no contesta.