L D (Agencias) Zapatero arropó este domingo a Miguel Sebastián en su primer mitin desde que fue designado candidato a la alcaldía para las elecciones municipales de mayo en un acto en el que aseguró que el PP cifra sus esperanzas en que la gente no le conozca, pero recordó: "cuando salí secretario general del partido me conocían mucho menos que a Sebastián, y mirad lo que ha pasado".
"Hoy me siento especialmente orgulloso y satisfecho de vosotros, dos personas que quieren gobernar Madrid y que son respetuosas, que han expuesto sus ideas y sensibilidades y han hablado de los problemas de Madrid, frente a los que hoy gobiernan, que sólo hablan de sus problemas y no respetándose no respetan al conjunto de la ciudadanía", dijo.
"Hoy me siento especialmente orgulloso y satisfecho de vosotros, dos personas que quieren gobernar Madrid y que son respetuosas, que han expuesto sus ideas y sensibilidades y han hablado de los problemas de Madrid, frente a los que hoy gobiernan, que sólo hablan de sus problemas y no respetándose no respetan al conjunto de la ciudadanía", dijo.
Zapatero anunció una campaña "con tono positivo -las malas caras, enfados y dimes y diretes para ellos-", dijo en referencia al PP, y aseguró que los socialistas se marcarán como prioridad la vivienda, los equipamientos sociales y "dedicarnos a la gente para hacer que Madrid sea un ejemplo de cohesión social, convivencia y ciudadanía".
"Claro que no somos todos iguales: frente a algunos que se preocupan por lo que ganan ellos, Simancas se preocupa por la gente que más problemas tiene", dijo, en alusión a la biografía de Esperanza Aguirre publicada estos días.
"Claro que no somos todos iguales: frente a algunos que se preocupan por lo que ganan ellos, Simancas se preocupa por la gente que más problemas tiene", dijo, en alusión a la biografía de Esperanza Aguirre publicada estos días.
El candidato del PSOE a la Alcaldía de Madrid, Miguel Sebastián, propuso durante la presentación de su candidatura construir "un Madrid integrador y cívico que, recordando a Tierno Galván (ex alcalde socialista de la ciudad entre 1979 y 1986), vuelva a enamorar a sus habitantes, a los de dentro y a los que vienen de fuera". Sebastián contrapuso la figura del "viejo profesor" con la del actual alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, de quien dijo que "no le interesa la gente y sólo le interesan las obras" y dijo que de momento no le criticaría más porque de eso "se encarga Aguirre".
Sebastián, recibido con gritos de "alcalde, alcalde" y constantemente interrumpido por los aplausos de los simpatizantes socialistas, contrapuso la figura del "viejo profesor" con la del actual alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, de quien dijo que "no le interesa la gente y sólo le interesan las obras". "Madrid está al servicio del alcalde, en vez de el alcalde al servicio de Madrid", resumió.
"De Gallardón se encarga Aguirre"
El aspirante socialista a alcalde de Madrid dedicó una buena parte de su intervención a criticar la gestión del alcalde de la capital, aunque advirtió a los simpatizantes que le pedían que diera "caña a Gallardón" que eso lo dejará "para más adelante". "No quiero ser muy cruel con Gallardón porque de eso se encarga Esperanza Aguirre", apuntó en referencia a la polémica biografía autorizada de la presidenta. En otro momento de su discurso, llegó a pedir a Simancas que "cuando sea presidente" y él regidor "no escriba una biografía machacando al alcalde de Madrid".
Tras dejar claro que "la oposición política no tiene que ver con la crítica personal", Sebastián reconoció que Gallardón "tiene algún acierto de vez en cuando". "No, no", le gritaron entonces los simpatizantes socialistas. "Fijaos que sí, contestó él. Ha tenido un acierto, le he oído decir que no va a leer el libro de Esperanza Aguirre hasta después de las elecciones y tiene razón porque después de ese día va a tener mucho tiempo libre".
"Imagínate que nunca pasara nada"
El candidato, que respondía con risas a los comentarios del entregado auditorio, prefirió centrar su crítica en las "campañas de publicidad y autobombo" emprendidas por el Ayuntamiento de Madrid, que en el caso de la iniciativa "Imagínate que nunca pasara nada" calificó de "obscena para los madrileños". "Por supuesto que van a pasar muchas cosas, Gallardón", le advirtió.
Según sus cálculos, esta campaña, puesta en marcha para explicar las obras que se están desarrollando en la capital, cuesta 150.000 euros al día, el dinero necesario para "contratar 800 policías más, construir 4.000 viviendas para jóvenes durante un año y crear 8.000 plazas de guardería". En ese punto, se comprometió a no llevar a cabo "ni una sola campaña más de publicidad y autobombo" si accede a la Alcaldía.
Madrid, un agujero permanente
En relación con las infraestructuras que se están construyendo en la ciudad, acusó al regidor de haber convertido Madrid en "un agujero", a causa de "obras permanentes, sin justificación y sin explicación". "Abre la acera y cierra la acera, levanta la calzada y cierra la calzada", señaló con sorna el candidato, quien calificó esta actuación como "un negocio fabuloso para algunos y muy ruinoso para la mayoría de los ciudadanos".
Tras la critica, explicó lo que definió como "el Madrid que yo quiero". "Un Madrid accesible, con buenos medios de transporte, donde caminar no sea una carrera de obstáculos ni una competición de salto de zanjas, detalló. Un Madrid que permita recuperar el tiempo, el tiempo para nosotros mismos y para las familias, en vez de derrocharlo en atascos interminables. Un Madrid seguro en el que la gente pueda pasear, trabajar, comerciar, divertirse con tranquilidad porque la seguridad es la base de la libertad".