(Libertad Digital) Los hechos sucedieron el 26 de marzo de 2007, cuando Ibarretxe acudió al tribunal a declarar por las reuniones que mantuvo con Batasuna-ETA. Entonces, radicales nacionalistas increparon, e incluso agredieron, a Daniel Portero (Dignidad y Justicia) y los dirigentes del Foro Ermua Iñaki Ezkerra y Antonio Aguirre.
El enfrentamiento, inicialmente verbal, acabó en unos altercados en los cuales Antonio Aguirre recibió una patada en los testículos cuando se retiraba a un hotel cercano.
En el atestado de la Ertzaintza se señaló que Portero, Ezkerra y Aguirre mantuvieron "constantemente una actitud de provocación con insultos, amenazas e incluso conatos de agresión a las personas reunidas, lo que ha alterado el normal transcurrir de la concentración oportunamente comunicada", por lo que se inició un procedimiento judicial.
Los tres acusados solicitaron el sobreseimiento y archivo de la causa, lo que ha sido desestimado hoy en un auto por la jueza Yolanda Paredes, que ha solicitado que se señale la vista oral para dilucidar en un juicio la participación o no de los denunciados en la falta que se les imputa.
El enfrentamiento, inicialmente verbal, acabó en unos altercados en los cuales Antonio Aguirre recibió una patada en los testículos cuando se retiraba a un hotel cercano.
En el atestado de la Ertzaintza se señaló que Portero, Ezkerra y Aguirre mantuvieron "constantemente una actitud de provocación con insultos, amenazas e incluso conatos de agresión a las personas reunidas, lo que ha alterado el normal transcurrir de la concentración oportunamente comunicada", por lo que se inició un procedimiento judicial.
Los tres acusados solicitaron el sobreseimiento y archivo de la causa, lo que ha sido desestimado hoy en un auto por la jueza Yolanda Paredes, que ha solicitado que se señale la vista oral para dilucidar en un juicio la participación o no de los denunciados en la falta que se les imputa.
Aguirre: "Esto es el mundo al revés"
En una nota remitida a Libertad Digital, Aguirre asegura que "esto es el mundo al revés". "En el País Vasco los verdugos se convierten en víctimas y las víctimas en verdugos. Se produce a partes iguales hilaridad e indignación", asegura.
En este sentido, afirma que la agresión que sufrió "fue alentada por el propio lehendakari Ibarretxe cuando a raíz de su primera comparecencia manifestó públicamente que no había contestado al abogado del Foro Ermua ni lo iba a hacer porque el Foro Ermua éramos unos generadores de odio y crispación en Euskadi".
"Con esas palabras ya nos puso en el punto de mira de las bases nacionalistas, y de algunos otros desgraciadamente, y esas bases convertidas en hordas nazis fueron las que en la 2ª comparecencia nos insultaron, coaccionaron y agredieron a las 3 personas que fuimos a acompañar a nuestro abogado, Fernando García-Capelo, para que no fuese linchado públicamente", ha sentenciado.