LD (EFE) Unos 500 soldados de la infantería de Turquía cruzaron durante la madrugada de este martes la frontera con el norte de Irak, según confirmaron fuentes militares. Los militares habrían penetrado más de tres kilómetros hasta llegar a un área montañosa de la provincia de Erbil, al parecer en persecución de terroristas del PKK.
Horas más tarde, se hacía público un comunicado del Gobierno autónomo del Kurdistán iraquí, citado por la agencia Asuat al Iraq, en el que se decía que "los cerca de 500 soldados turcos que cruzaron la frontera entre Irak, Irán y Turquía en la región de Jowakork, en el noreste de Irak, comenzaron a volver esta tarde a sus puestos en territorio turco".
Por su parte, una fuente cercana al grupo terrorista del Partido de los Trabajadores del Kurdistán dijo que sus hombres se habían enfrentado hoy con unos mil soldados turcos en las localidades de Shamzinan y Sidakan, en la provincia de Erbil, en el Kurdistán iraquí.
El comunicado del Gobierno del Kurdistán, sin embargo, no especificó si se registraron bajas en las filas turcas o en las del PKK, aunque el corresponsal en Erbil de la cadena de televisión Al Yazira informó de que cinco soldados turcos fallecieron durante la incursión.
Por su parte, el primer ministro de Turquía, Recep Tayip Erdogan, afirmó que el Ejército turco hace lo "necesario" para acabar con las bases del PKK en Irak y no dio más detalles sobre la incursión.
Este incidente se produjo al día siguiente de que aviones de combate turcos bombardearan ciertas zonas de la cordillera de Kandil, también en el Kurdistán iraquí, lo que causó la muerte de siete personas.
Por su parte, una fuente cercana al grupo terrorista del Partido de los Trabajadores del Kurdistán dijo que sus hombres se habían enfrentado hoy con unos mil soldados turcos en las localidades de Shamzinan y Sidakan, en la provincia de Erbil, en el Kurdistán iraquí.
El comunicado del Gobierno del Kurdistán, sin embargo, no especificó si se registraron bajas en las filas turcas o en las del PKK, aunque el corresponsal en Erbil de la cadena de televisión Al Yazira informó de que cinco soldados turcos fallecieron durante la incursión.
Por su parte, el primer ministro de Turquía, Recep Tayip Erdogan, afirmó que el Ejército turco hace lo "necesario" para acabar con las bases del PKK en Irak y no dio más detalles sobre la incursión.
Este incidente se produjo al día siguiente de que aviones de combate turcos bombardearan ciertas zonas de la cordillera de Kandil, también en el Kurdistán iraquí, lo que causó la muerte de siete personas.
Información de ayuda
Por su parte, Bryan Whitman, portavoz del Departamento de Defensa de EEUU, informó que su país ha ofrecido información al Gobierno de Turquía para poder localizar a miembros del grupo terrorista del PKK escondidos en el norte de Irak, y sigue haciéndolo.
Whitman, que no especificó si Washington proporcionó a Turquía información sobre objetivos precisos atacados este fin de semana por Ankara, agregó que EEUU "continúa asistiendo a Turquía con información que les ayudará a hacer frente al problema de los insurgentes".
El Ejército turco llevó a cabo el domingo la operación transfronteriza más exhaustiva desde que fue autorizado por el Gobierno el pasado mes y bombardeó campamentos del PKK en el norte de Irak, con veinticuatro cazas de combate F-16 y artillería de largo alcance. A su vez, Whitman subrayó que Washington había proporcionado a Turquía información "útil relacionada con la amenaza terrorista insurgente". Por último, el portavoz no quiso entrar si EEUU le concedió permiso previo a los ataques a Turquía, para usar el espacio aéreo iraquí.
Objetivos alcanzados
Por su parte, el Estado Mayor del Ejército turco desmintió las acusaciones de haber bombardeado objetivos civiles durante la incursión aérea en el norte de Irak contra bases del grupo terroristas del PKK. Explicó que la operación fue completada con éxito y todos los objetivos fueron golpeados tal y como estaba planeado.
La cúpula castrense de Turquía destacó que "todos los objetivos fueron cuidadosamente determinados siguiendo un detallado análisis y fueron incluidos entre los objetivos tras haber comprobado exactamente que no se trataba de enclaves donde viviesen civiles".
Sin embargo, la agencia de noticias pro kurda Firat informó que quince aldeas fueron bombardeadas por los aviones turcos y denunciaron la destrucción de un hospital y dos escuelas. Según los terroristas del PKK, cinco de sus militantes murieron, además de dos civiles.
El pasado fin de semana, Turquía lanzó una amplia ofensiva en la que participaron más de veinte aviones y artillería pesada.