LD (EFE) El juez argentino Ariel Lijo ha dictado condenas de veinte a veinticinco años de prisión contra Cristino Nicolaides, ex jefe del Ejército, y contra los antiguos mandos Jorge Luis Arias Duval y Santiago Hoya. A los sentenciados se les considera culpables del secuestro y desaparición de veinte guerrilleros. Los delitos fueron cometidos durante la dictadura militar que gobernó el país. Esta es la primera sentencia emitida contra represores tras la anulación de las llamadas "leyes del perdón", en 2003.
Lijo impuso además una pena de veintitrés años de cárcel a Juan Carlos Gualco y Waldo Roldán; de veintiún años a Carlos Fontana, y de veinte años a Pascual Guerrieri, todos ellos antiguos mandos del Ejército. El ex policía Julio Simón, en tanto, fue condenado a veintitrés años de cárcel.
Fuentes judiciales informaron que Nicolaides, en prisión domiciliaria en la provincia de Córdoba (centro del país), no estuvo presente durante la lectura del veredicto "por cuestiones de salud", al igual que Gualco. Después de la lectura de un resumen de la sentencia, que ocupa unas trescientas hojas, integrantes de organismos de derechos humanos despidieron con insultos a los condenados presentes en la divulgación del veredicto.
El secretario de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde, tras declararse "conforme" con la sentencia, dijo que a los responsables se les condenó "no por la gravedad de lo que han hecho sino por lo que se les ha probado, de todos modos se ha hecho justicia".