(Libertad Digital) En un acto preelectoral en Oviedo, Mariano Rajoy ha comenzado su discurso agradeciendo a la militancia de su partido el respaldo durante estos "difíciles" cuatro años. También ha querido dar las gracias "a muchos españoles que en su momento no nos dieron su confianza y que ahora miran con ilusión y ganas al PP".
"Gracias a toda esa gente, el cambio necesario es hoy un cambio posible y dentro de pocas semanas será un cambio real", ha proclamado Rajoy entre aplausos. "He recorrido España muchas veces y hoy siento, intuyo, lo veo en los ojos, que nosotros vamos a ganar y España va a tener otro presidente", ha insistido.
Rajoy también ha aludido a la estrategia de Zapatero ante las elecciones, revelada tras la entrevista en Cuatro con Gabilondo. "Un presidente no debe ofrecer tensión ni dramatismo, un presidente debe ofrecer moderación y seguridad", ha dicho, antes de insistir en que él se compromete a ofrecer ambas cosas. "Zapatero se quitó la careta y a la vista de todos qued´p el careto", ha bromeado el líder del PP en alusión a la revelación tras la entrevista.
"Dice que le interesa la tensión y el drama… a mí no, y a los españoles, tampoco", ha insistido Rajoy antes de prometer "tranquilidad, acuerdos, la mano tendida y ocuparme de los problemas reales". "En el fondo, ha dicho lo que ha hecho a lo largo de estos cuatro años", ha continuado el líder del PP, que ha resumido lo que ha sido esta legislatura: "Ha creado problemas, se ha ido con los radicales, pone cara de bueno, se presenta como una víctima, le echa la culpa de todo al PP…"
"Nos han arreado mucho"
Rajoy ha tenido palabras en su discurso para calificar los cuatro años de gobierno del PSOE, que califica de "duros y difíciles", ya que han obligado a defender, "en contra de muchas fuerzas políticas", ideas y principios que "nunca se pusieron en tela de juicio en España". Respecto al trato recibido por el PP durante la legislatura, dice que "nos han arreado mucho en estos años", pero "hoy, después de todo lo que pasó, estamos aquí y vamos a ganar". Zapatero, dice el candidato del PP, "está en la luna", genera "incertidumbre" y gobierna con "ocurrencias e improvisaciones". Su partido, ha dicho, responde a todo ello con un programa, y con "ganas, agallas, coraje y determinación para resolver los problemas".
La política económica del Gobierno ha sido tratada por Rajoy, acusando al Ejecutivo de obrar acomodado en el "inmovilismo", por culpa de un ministro, Pedro Solbes, con una actitud "aburrida" y "cansada", asegurando que éste "quiere dejar la política desde hace años".Sobre la materia de inmigración, ha asegurado en el acto electoral que "quiero para todos los seres humanos, sea cual sea su ideología o raza, los mismos derechos y oportunidades, pero también los mismos deberes y obligaciones", en un asunto en el que "no vale la política del avestruz", sino "orden, control y legalidad".
Rajoy ha lamentado que Zapatero haya practicado tan desastrosa política internacional, agradeciendo no obstante que sean Francia, Alemania y Holanda las que apoyen al Partido Popular, e ironizando acerca de Hugo Chávez, "ese que no ha dejado cantar a Alejandro Sanz".