L D (Agencias) Dichas fuentes aseguraron que esta decisión estaba tomada antes de que el actual presidente del partido, Josep Lluís Carod-Rovira, anunciara este martes que no se presentará a la reelección de este cargo. Aun así, este anuncio podría precipitar la determinación de Puigcercós de hacerlo público.
De todas formas, aún no ha transcendido quién se presentará para secretario general en la candidatura del sector próximo a Puigcercós. Los estatutos de ERC indican que la presidencia del partido ejerce "la máxima representación política e institucional de ERC", algo que concuerda con la intención manifestada por Puigcercós de presentarse también como candidato a la presidencia de la Generalidad.
Así, en el próximo congreso de ERC, Puigcercós pugnará, inicialmente, con las candidaturas de la corriente crítica del diputado Uriel Bertran, Esquerra Independentista (EI), y la del ex consejero Joan Carretero, Reagrupament.cat (RCat), además de la que presentará el sector próximo a Carod.
Carod dice adiós
En la mañana de este martes, en una entrevista en los micrófonos de Catalunya Radio, Josep Lluís Carod Rovira adelantó que no se presentará a la reelección como máximo dirigente de la formación independentista en el próximo congreso del partido. Según explicó, con esta decisión quedará "al margen de todas las discusiones internas" de la formación, que se auguran muy fuertes.
Preguntado por si esta decisión supondrá renunciar a ser candidato a la presidencia de la Generalidad en las próximas elecciones autonómicas, Carod, que reconoció "haber cumplido una etapa dentro del partido", y precisó, sin embargo, que "no renuncio a nada" y que se presentaría a unas elecciones primarias dentro de ERC para escoger al candidato.
"Es la hora de los gestos, y yo hago el primer paso y el primer gesto", señaló, después de los resultados electorales del 9 de marzo, en los que ERC perdió cinco diputados. Carod definió su renuncia como "es un gesto a favor de la unidad y renovación del partido, de generosidad política". Recordó que cuando ha sido candidato de ERC el partido ha obtenido sus "mejores resultados", de manera que dijo poner "este capital" al servicio del partido. "El partido sabrá si le conviene o le interesa que yo sea el candidato. Si el partido me lo pide, yo, encantado de la vida", apostilló.
El actual presidente de los independentistas defendió que ERC debe "pasar de la resistencia, la cultura de la oposición, a veces un poco antigubernamental o extra-institucional con tics periféricos" a "una cultura con vocación de mayorías, de gobierno, de seriedad", que "cumple los acuerdos" y "no genera sensación de inestabilidad".
También defendió que ERC debe variar el "modelo de partido" porque "se ha hecho grande y tiene estructura de partido pequeño, controlable, con mucho aparato y maquinaria interna". Y es que ha "llegado el momento" de que las personas que desde 1996 dirigen el partido "dejen paso a otra generación, a otra gente, a otras personas".