Menú
LE TACHA DE "CARDENAL DE LA CRISPACIÓN"

El País carga contra García Gasco

Primero fue el presentador de Cuatro Iñaki Gabilondo, después el consejero delegado de Prisa, Juan Luis Cebrián, y este domingo vuelve a ser El País en un extenso reportaje el que vuelve a cargar contra la Iglesia católica tras su exitosa concentración a favor de la Familia. Haciendo suyo el discurso del PSOE, el periódico de Prisa acusa al arzobispo de Valencia, monseñor Agustín García Gasco, de ser "uno de los más feroces azotes del Gobierno". Bajo el titular "El cardenal de la crispación", el periódico amigo de los socialistas recoge las palabras de un sacerdote a la revista Alandar tachando a García Gasco de "pequeño dictador".

Primero fue el presentador de Cuatro Iñaki Gabilondo, después el consejero delegado de Prisa, Juan Luis Cebrián, y este domingo vuelve a ser El País en un extenso reportaje el que vuelve a cargar contra la Iglesia católica tras su exitosa concentración a favor de la Familia. Haciendo suyo el discurso del PSOE, el periódico de Prisa acusa al arzobispo de Valencia, monseñor Agustín García Gasco, de ser "uno de los más feroces azotes del Gobierno". Bajo el titular "El cardenal de la crispación", el periódico amigo de los socialistas recoge las palabras de un sacerdote a la revista Alandar tachando a García Gasco de "pequeño dictador".
(Libertad Digital) El periódico estandarte del grupo Prisa continúa sus agravios contra la Iglesia. En esta ocasión su víctima ha sido el arzobispo de Valencia, monseñor Agustín García-Gasco, del que dicen "se ha convertido en uno de los más feroces azotes del Gobierno". Para ello, recoge las palabras de un sacerdote a la revista Alandar que asimila su forma de "gobernar la archidiócesis" con la de "un pequeño dictador".
 
Según El País, "es una pieza clave para el pulso contra el Gobierno socialista", motivo por el que el Santo Padre ha prolongado su mandato a pesar de que hace un año dimitió por razón de edad, actualmente con 76 años.
 
En el resumen de su biografía, el periódico intenta a cargar contra monseñor echando la vista atrás y sugiriendo que estuvo envuelto en "un problema por una herencia". Ya en su periodo como sacerdote vuelven los ataques: "Entre 1958 y 1970 fue asesor religioso del Ministerio de Educación y la Diputación de Madrid: eran los tiempos de Franco".
 
Desde el 3 de octubre de 1992 se encuentra en la archidiócesis de Valencia donde, según El País, ha ido sumando enemistades. Según el sacerdote Emili J. Marín a dicho medio, incluso "personas de obediencia ciega a la autoridad han acabado pleiteando con el señor arzobispo".
 
Lo relacionan con el PP, con quien inició "un armonioso maridaje"
 
Según continúa el reportaje, "el arzobispo inició un armonioso maridaje con el PP" por lo que, según aseguran, "alcanzó pronto una fluida relación con el entonces presidente de la Generalidad, Eduardo Zaplana, a quien organizó actos en plena campaña electoral para atraer el voto católico y de quien recibió cuantiosas ayudas para la Iglesia".
 
Esta relación entre la Iglesia y la Generalidad mejoró con la llegada de Francisco Camps a la presidencia, "quien juró sobre la Bibilia" añade El País. "Camps impulsó la creación de la Universidad Católica de Valencia, concedió una emisora de televisión autonómica a la Cope y multiplicó las ayudas a la Iglesia, hasta alcanzar el 85% del total de las subvenciones e inversiones de la Generalidad destinadas a patrimonio artístico", espeta el periódico.
 
Una serie de aportaciones y de informaciones en las que no se cita en ningún momento el papel fundamental de la Iglesia valenciana, y de su arzobispo, en aspectos sociales y solidarios. En oposición, Prisa sólo recaba aquellos datos que, en su opinión, pueden desprestigiar al que califican como "cardenal de la crispación".

En Sociedad

    0
    comentarios