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Que me atienda Montes

El Doctor M. tiene club de fans. Inés seguramente no sería socia. Acudió a Urgencias del Severo Ochoa el 8 de noviembre de 2003 por un ictus y una infección de orina. Tenía 85 años. Le inyectaron un cóctel con 40 miligramos de morfina y 100 de Tranxilium, el doble de lo habitual. Treinta horas más tarde, después de que otro equipo médico hubiese retirado la sedación por "contraindicada", elevaron la dosis: 200 miligramos de Tranxilium más 50 de morfina. Falleció a la media hora. PSOE e IU apoyan la plataforma Que me atienda Montes, que volverá a manifestarse el próximo martes contra el Gobierno de Esperanza Aguirre.

El Doctor M. tiene club de fans. Inés seguramente no sería socia. Acudió a Urgencias del Severo Ochoa el 8 de noviembre de 2003 por un ictus y una infección de orina. Tenía 85 años. Le inyectaron un cóctel con 40 miligramos de morfina y 100 de Tranxilium, el doble de lo habitual. Treinta horas más tarde, después de que otro equipo médico hubiese retirado la sedación por "contraindicada", elevaron la dosis: 200 miligramos de Tranxilium más 50 de morfina. Falleció a la media hora. PSOE e IU apoyan la plataforma Que me atienda Montes, que volverá a manifestarse el próximo martes contra el Gobierno de Esperanza Aguirre.
LD (V. Gago) El presidente del Gobierno se hizo un lío el pasado 11 de febrero, durante su entrevista con Iñaki Gabilondo en el canal de televisión Cuatro.
 
El veterano periodista le invitó a comentar el caso de las sedaciones terminales en el servicio de Urgencias del Severo Ochoa de Leganés (Madrid). José Luis Rodríguez Zapatero hizo un alegato a favor del honor y la profesionalidad de Luis Montes, cuyo retrato se proyectaba en ese momento como decorado, detrás del busto parlante del presidente.
 
Fue entonces cuando dijo lo siguiente:
 
"Todos confiamos en nuestro sistema público de Salud, uno de los mejores del mundo. Confiamos en nuestros médicos. Sabemos que hacen todo lo que está en sus manos para salvar vidas, pero sabemos también que, con el consentimiento de las familias, prolongar el dolor, hacer morir sin dignidad a una persona, entra dentro de lo que es la deontología de un buen médico".
 
Vea aquí el fragmento de la entrevista dedicado al caso de las sedaciones terminales practicadas por el doctor Montes:
 
 

 
Estos comentarios de Rodríguez Zapatero han pasado inadvertidos bajo la tormenta política causada por su confesión a Gabilondo de que le conviene una campaña con "tensión" y que, por esa razón, va a "dramatizar" todo lo que pueda, en sus ataques al PP.
 
Sin embargo, las declaraciones de Zapatero sobre el caso Montes revelan que, para el presidente del Gobierno, es ético y digno "hacer morir" a una persona a discreción del médico que la atiende, aun cuando no se dé la primera de las condiciones para administrar una sedación terminal, esto es, la condición terminal del paciente, y aunque el médico que tiene en sus manos la vida y la muerte decida saltarse todos los protocolos y le suministre una dosis excesiva de sedantes que posiblemente resulta letal de necesidad, según ha dictaminado por unanimidad la comisión de expertos designada por el Colegio de Médicos de Madrid.
 
Es evidente que el presidente se hizo un lío con el sentido de sus propias palabras, y que cuando dijo que "prolongar el dolor, hacer morir sin dignidad a una persona, entra dentro de lo que es la deontología de un buen médico", quiso decir, en realidad: "evitar el dolor, hacer morir con dignidad a una persona, entra dentro de lo que es la deontología de un buen médico". Pero la anécdota no mitiga la relevancia de que, para el presidente del Gobierno, es lícito que el médico decida cuándo "hacer morir" –en expresión del propio Zapatero– a una persona.
 
"HACER MORIR" A PACIENTES NO TERMINALES
 
El caso de Inés, de 85 años [historial clínico 526.843] resume el alcance de las "malas prácticas médicas" detectadas por el Colegio de Médicos en el Servicio de Urgencias del hospital Severo Ochoa. Era una "paciente no terminal" que, "ante un ictus y un cuadro infeccioso", recibió "sedación sin indicación de tratamiento de ningún síntoma refractario y sin agotar el tratamiento indicado activo".
 
La anciana pudo ser salvada por un equipo médico distinto que, al cambiar el turno de guardia en el Servicio de Urgencias, detectó la "excesiva" –siempre, según el informe pericial del Colegio de Médicos– sedación que se le había administrado y se la retiró inmediatamente. La mujer vivió sin morfina durante 30 horas, hasta que, al entrar el equipo médico anterior, en un nuevo cambio de turno, se le volvió administrar la sedación, esta vez con una dosis aún mayor: 200 miligramos de Tranxilium más 50 de morfina. Inés falleció a la media hora.
 
DE 267 A 99 MUERTES EN URGENCIAS
 
El elevado número de muertes en Urgencias del Severo Ochoa ya había alertado a los propios responsables del hospital. En 2002, habían fallecido 242 personas, un 45,3 por ciento del número total de muertes registrado en el hospital. Y en 2003, cuando se emiten los primeros informes internos, el número de fallecidos en Urgencias se elevó a 267.
 
Desde que trascendió el escándalo, en 2005, el número de fallecimientos en Urgencias bajó a 114, ese mismo año; y después de la destitución de Luis Montes como responsable del Servicio, el número de decesos ha pasado a 71, en 2006, y 99, en 2007.
 
El presidente del Gobierno no tuvo en cuenta estos datos en sus comentarios a Iñaki Gabilondo sobre el caso de las sedaciones terminales en el Severo Ochoa. Para Rodríguez Zapatero, no hay nada anómalo, sino todo lo contrario, digno y ético, en "hacer morir con dignidad a una persona", una decisión que, a juicio de Zapatero "entra dentro de lo que es la deontología de un buen médico".
 
PSOE E IU SE MANIFIESTAN CONTRA EL GOBIERNO AGUIRRE
 
La plataforma Que me atienda Montes cuenta con el respaldo del PSOE, IU y de los sindicatos UGT y CC OO, entre otras organizaciones sindicales y de izquierdas. Después de reunir a unos pocos cientos de personas el pasado jueves, en una marcha por las calles de Leganés, volverán a manifestarse el próximo martes a las puertas de la sede de la Presidencia de la Comunidad de Madrid, en la Puerta del Sol.
 
La marcha se celebrará con tres lemas: Por el cese del Señor Lamela, consejero de Sanidad de Madrid en la época en la que se abrió la investigación; Por la restitución de los represaliados, en alusión al hecho de que Luis Montes fue apartado del Servicio de Urgencias y ahora ejerce como anestesista del hospital; y Por la defensa de la Sanidad Pública, ya que para la plataforma Que me atienda Montes, todo el escándalo obedece a la secreta intención del Gobierno de la Comunidad de Madrid de desmantelar los hospitales públicos.

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