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Aznar aboga por renovar el pacto atlántico y crear una "Alianza por la Libertad y la Prosperidad"

José María Aznar ha propuesto la creación de una “Alianza por la Libertad y la Prosperidad” que reúna a los países occidentales en un pacto atlántico renovado. Por lo que respecta a la guerra de Irak, ha afirmado que se han librado dos conflictos, “el de la moralidad internacional contra Sadam” y el de “unos pocos países más preocupados por ser contrapeso de la democracia que por combatir las verdaderas amenazas del mundo libre”.

Libertad Digital (EFE) El ex presidente del Gobierno repasó este viernes –en una conferencia que dictó en la ciudad italiana de Pisa– los cambios experimentados en las relaciones internacionales tras el 11-S y la guerra de Irak. A propósito de este último acontecimiento, declaró que 
ha supuesto al menos dos conflictos simultáneos: de la moral internacional contra Sadam y de unos pocos países más preocupados por ser contrapeso de la democracia americana que por combatir las verdaderas amenazas del mundo libre".
 
Por lo que hace a las relaciones entre Occidente, dijo que "tal vez sea el momento de redescubrir la Carta Atlántica”, y  de “reescribirla a la luz de las nuevas circunstancias”. “Tal vez –prosiguió– haya llegado la hora de pensar en una Alianza por la Libertad y la Prosperidad que reúna a los países deseosos de promover ambas agendas de la misma manera".
 
En defensa de la libertad y los derechos individuales, "valores superiores"

Aznar recordó que, cuando el presidente de EEUU, Franklin D. Roosevet, y el primer ministro británico, Winston Churchill, firmaron la Carta Atlántica (14 de agosto de 1941), "quedaba sentado que la libertad de la persona y sus derechos individuales eran valores superiores compartidos por Occidente". Tales valores siguen vigentes, afirmó a continuación, y compartirlos "significa comprometerse y no salir corriendo, la valentía de enfrentarse a los problemas, llamarlos por su nombre y hacer todo lo posible por tratar de resolverlos".
 
La "debilidad y la división" favorecen a los terroristas islámicos

También hizo referencia a Al-Qaeda; en los siguientes términos: "La red terrorista de Ben Laden asesina en la creencia de que las decadentes democracias occidentales se inclinarán ante el terror de sus actos indiscriminados, de que sus débiles Gobiernos cederán al chantaje de los cuerpos mutilados y (de que) sus frágiles sociedades terminarán derrumbándose como castillos de naipes".

Tras sostener que los ciudadanos, su ética y sus creencias son el primer objetivo del terrorismo islámico, el anterior jefe del Ejecutivo alertó tanto sobre el error de "la debilidad y la división" como de la despreocupación de "miembros de nuestra sociedad, algunos líderes incluidos, que no quieren defenderlos".
 
A su juicio, el primer objetivo en la lucha contraterrorista debe ser contribuir a la consolidación del Gobierno interno de Irak, así como a la reconstrucción política y económica de ese país.

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