L D (EFE) El ex vicepresidente del Gobierno dedicó su intervención a realizar una encendida defensa del nuevo “talante” del Gobierno de Zapatero. Con el mismo tono irónico y mordaz de siempre, Alfonso Guerra comparó las formas del actual Ejecutivo con el de Aznar. Pese a que las referencias al presidente anterior fueron constantes, Guerra no se dirigió a él ni una sola vez por su nombre. En la mayoría de los casos aludía como “el tío del bigote”, otras veces era “Rambo”. Hace un año, en el mismo escenario, levantó la polémica por llamar a Rajoy “mariposón”. Esta vez aclaró que no diría “ni una sola sílaba sobre él porque el año pasado dije una palabra y recorrió toda España”.
Guerra destacó la "referencia ética" con la que actúa el líder del PSOE y el "realismo y la serenidad" con la que afronta el problema territorial de España y comparó su actitud con la que Aznar guió su gestión gubernamental. Se mostró convencido de que Zapatero nunca actuará "como Aznar apropiándose de España" o de "documentos secretos". "Son cosas de talante, pero que cambian un país", añadió. "Aznar casó a su hija en El Escorial, como si fuera un Rey, y Zapatero protege a las suyas de la prensa", apuntó.
Guerra mencionó también otros asuntos, como el accidente del Yakovlev 42 y la catástrofe del “Prestige” para criticar al Ejecutivo Aznar, al que sólo se refirió como "el tío del bigote". Cuando más aplausos arrancó fue al exponer que "hace un año después de la fiesta de Rodiezmo volvíamos a casa y en la televisión sólo aparecía el del bigote y hoy sale José Luis. Es como cambiar a Rambo por Harrison Ford, a una persona enfadada por una persona sensible".
Deshacer lo hecho por el PP
El ex vicepresidente del Gobierno aludió también a Mariano Rajoy aunque, al contrario que el año pasado en este mismo acto, evitó referirse a él como “mariposón”. "Hoy ni diré ni una sola sílaba sobre él porque el año pasado dije una palabra y recorrió toda España", explicó en referencia a la polémica que provocaron sus palabras.
Al igual que hizo después el presidente del Gobierno, Guerra ironizó con el ejemplo de "renovación" que, a su juicio da, el PP presentando de nuevo a Manuel Fraga como candidato a la Presidencia de Galicia. También denunció la política educativa puesta en marcha por el PP y abogó por "pensarse muy seriamente qué pasa con los acuerdos con la Santa Sede".
Tras destacar que el terrorismo es una de las "dificultades" a las que tiene que hacer frente del Gobierno del PSOE, Guerra se refirió al secuestro de la escuela de Beslán, en Osetia del Norte. Lo hizo para advertir de que "el terrorismo no se combate bombardeando Irak o mandando entrar en un colegio donde hay mil niños".