(Libertad Digital) En su discurso con motivo del Día de Extremadura, el presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, dijo lo siguiente: "En cuanto uno ha levantado la veda y ha invitado a otro al club de los privilegiados, han saltado otros a pedir su adjetivo, a recordar su carácter histórico, a exhibir blasones apolillados, a querer ser nacionalidades y cosas así, al pillaje más absoluto".
A su juicio, esta actitud tiene un origen "infantil", el de "buscar insistentemente un cambio de nombre que haga aparecer como algo distinto de lo que se es", y es nociva para el país porque "desconcierta" a quienes pretenden lograr nuevas denominaciones para sus territorios y "confunde a quienes tenemos que relacionarnos con ellos". El primero en comentar las palabras de Ibarra fue el ministro catalán
José Montilla, que interpretó que, obviamente, se refería a la invitación de Pasqual Maragall a Manuel Chaves. Por ello, Montilla despreció las palabras del presidente extremeño y las calificó como “gracietas que rayan lo cómico”.
Pero además, Rodríguez Ibarra advirtió en el mismo discurso que "cuando los poderosos llaman a su juerga al cuadro flamenco es para que beba lo justo para cantar, tocar las palmas y hacer gracias al respetable". Como no dijo nombres, pero estaba claro a quién apuntaba, enseguida salió a la palestra el presidente Andaluz, Manuel Chaves, para dejar claro a Ibarra que "quizá porque lo ignora o desconoce, el flamenco es una manifestación cultural muy importante en Andalucía que forma parte de la identidad y del sentimiento de los andaluces y de las andaluzas" y que "es mucho más que bebida y que palmas".
Rectificacion de Ibarra: El "palmero" era Matas
Como es habitual en el presidente de la Junta de Extremadura, ha tardado menos de 48 horas en decir, una vez más, que se han malinterpretados sus palabras. Ahora resulta que los “palmeros” son los presidentes de comunidades del PP, como Jaume Matas, los que, según él, se intentan subir al carro de Maragall pero sin mojarse. En la Cadena SER, dijo este jueves que “en el momento en que Maragall invita a Chaves a que Andalucía sea una comunidad histórica han salido otros (como "por ejemplo" el presidente de Baleares, Jaume Matas), que afirman que lo de Maragall es inconstitucional pero por si acaso dicen ‘apúnteme en la lista porque yo estoy dispuesto a llegar como los demás’”. Ibarra criticó a quienes “tienen el cinismo” de atacar a Maragall por “querer romper la unidad de España”, pero “si lo consigue también quieren aprovecharse”.
Vázquez y Bono cogen el testigo
Sin embargo, este intento de apaciguamiento de Ibarra tras la lucha abierta en su partido llega tarde. Este jueves en Telecinco, el presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias y alcalde socialista de La Coruña, Francisco Vázquez, ha defendido las primeras palabras de Ibarra y dijo, en un claro ataque a Montilla, que “tienen de todo, menos de cómicas” y recordó que “defienden los valores del PSOE”. “Lo que sí tienen que llamar la atención son otras declaraciones más habituales y que ponen en solfa la línea política del PSOE”, dijo Vázquez. Para que no se malinterpretasen sus palabras, el alcalde de La Coruña sí dio nombres y apellidos al criticar a aquellos que “acuciados por su realidad política, como es el caso de los compañeros de Cataluña, intentan ir un poco más allá” de lo que son las líneas del PSOE.
En la misma línea, el ministro de Defensa,
José Bono, dijo que, "con más o menos acierto en sus palabras", Juan Carlos Rodríguez Ibarra ha defendido "en pie de igualdad a todos los españoles", y rechazó las críticas a "un planteamiento solidario" como el defendido por el presidente de Extremadura. "No estoy en disposición de que se haga burla del presidente de Extremadura, porque todos podemos cometer errores, él sin duda puede haberlos cometido, pero en defender en pie de igualdad a los españoles no ha cometido error", dijo Bono en declaraciones a Punto Radio, en clara referencia al trato que Montilla o Patxi López han otorgado al socialista extremeño.
Patxi López: "Rectificación por el camino"
Por si fuera poco lío, el propio presidente del Consejo Territorial del PSOE, Patxi López, ha reconocido que “hay declaraciones en las que puede más el personaje que el político, como le ocurrió a Ibarra, que luego tiene que rectificarlas por el camino". En Radio Euskadi, López dijo que las apreciaciones del presidente de Extremadura sobre la reforma de los estatutos "sólo sirven para alentar al Partido Popular". El secretario general y candidato a lehendakari del PSE-EE señaló que, dentro del PSOE, las discrepancias sobre el modelo territorial son "más en las voces que en los contenidos" y que el documento aprobado en Santillana antes de las elecciones generales es un "paraguas" en el que caben "los planteamientos de los socialistas catalanes, extremeños o vascos".
Zapatero y Maragall, de puntillas
Desde Túnez, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, pasó de puntillas por la polémica y dijo que el “compañero Rodríguez Ibarra se expresa en muchas ocasiones con mucha pasión. Unas veces más afortunadamente y otras con menos fortuna”, pero, continuó ZP, “tenemos que acostumbrarnos a que en la España democrática se exprese con libertad”. Por su parte, el presidente de la Generalidad de Cataluña, Pasqual Maragall, declinó "entrar en discusiones que no llevan a ningún sitio".
