L D (EFE) Tres años después de que EEUU acabara con el régimen talibán, los afganos han podido votar por primera vez en su historia en una elecciones presidenciales. Según el portavoz de la ONU, Manoel Almeida e Silva, "la mayoría" de los 10,5 millones de ciudadanos registrados en el censo electoral se han acercado a votar. En rueda de prensa minutos antes del cierre oficial de los colegios, Almeida mostró su satisfacción por "la gran participación popular y la seguridad en el país" durante este día, pese a las amenazas de los terroristas talibanes y de Al-Qaeda.
Dos horas antes del final de la jornada electoral, 15 de los 18 candidatos en los primeros comicios presidenciales afganos pidieron la suspensión de las votaciones al considerar que "no han sido limpias ni libres", debido a que muchos electores habían sido marcados con una tinta errónea y habían podido repetir su voto. .
El problema que ha llevado a pedir la suspensión de los comicios se originó al comprobar muchos electores que la tinta con la que se les marcaba en un dedo para que no pudiesen repetir el sufragio se eliminaba muy fácilmente lavándose las manos o rascándola. El JEMB, compuesto por Naciones Unidas y un comité afgano, se negó a aceptar la petición de los 15 candidatos de suspender las votaciones en un escrito en el que admitía que, "dada la complejidad de este proceso electoral, son inevitables algunos problemas técnicos".
Sin embargo, no ha rechazado la posibilidad de una actuación posterior, al señalar que todas las quejas recibidas "serán investigadas" y "se decidirá sobre ellas" a la hora de evaluar si los resultados "reflejan exactamente el deseo del pueblo afgano". En su nota, el JEMB animaba a votar a última hora a los electores que aún no lo habían hecho, les pedía que impidiesen "cualquier intento de votación múltiple" y que mantuvieran "el ambiente pacífico que ha prevalecido hoy en todo el país".