LD (Agencias) El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, reiteró en el Senado, que el objetivo de su Ejecutivo es "combatir y acabar con el terrorismo" y que el único destino de ETA es abandonar las armas y disolverse.
En una primera reacción al atentado en la calle Rufino González del distrito madrileño de Ciudad Lineal, Zapatero, que tuvo que referirse a la explosión después de que Pío García Escudero, portavoz del PP, le mostrara el apoyo de su partido en la lucha contra el terrorismo, pidió que en la lucha es necesario mantener una plena unidad que permita a todos "identificarnos" con la lucha antiterrorista.
En su turno, el portavoz del PP le había recordado al presidente del Gobierno que la nueva acción terrorista "no parece un deseo de negociación sino más bien un intento de presión". Pero, Zapatero en su respuesta se limitó a destacar el eficaz trabajo que vienen realizando los cuerpos de seguridad del Estado, "fruto de un amplio esfuerzo de la sociedad democrática, del conjunto de los partidos políticos". El líder socialista expresó su deseo de que el futuro trabajo antiterrorista "sea de plena unidad y en el que todos nos sintamos identificados con una política antiterrorista". El mandatario pidió que nadie dude de que "la democracia es y va a ser más fuerte y que el estado de derecho va a imponer sus reglas por su fortaleza moral y porque es la voluntad inmensamente mayoritaria del conjunto de los españoles".
Por su parte, García Escudero brindó el apoyo de su formación política a la lucha antiterrorista afirmando que "una vez más, mi partido le apoya en la lucha contra el terrorismo". El portavoz subrayó que hasta ahora lo eficaz en el combate contra el terror había sido el trabajo de las fuerzas de seguridad, de los jueces, la cooperación internacional y la presión social y, por ello, reafirmó su apoyo a esa política antiterrorista.