(Libertad Digital) Manuel Fraga brindó al conocer que había ganado una vez más las elecciones gallegas pese a los augurios demoscópicos de descalabro. Pero que el PP vuelva a gobernar en la Xunta depende de que los emigrantes le asignen un escaño de Pontevedra. Para conseguirlo necesita obtener una ventaja sobre el PSOE en esa provincia de unos 8.100 votos. El lunes 27 de junio se abren las sacas y se empieza a contar. La prensa de Argentina, Venezuela y Uruguay ha seguido nuestra noche electoral con especial atención.
Los sondeos han fallado su pronóstico, sobre todo, para el PP y el BNG. El mejor resultado que concedían a Fraga era de 35 escaños. Hasta la mitad del escrutinio –en torno al 51 por ciento– el PP tenía la mayoría absoluta que conceden los 38 asientos del Parlamento gallego.
A partir de ese momento, perdió uno y se mantuvo la tendencia con un ligero trasvase hacia el PSOE. Una de las noticias de la jornada es el batacazo electoral del BNG que pierde hasta 4 escaños respecto a los comicios de 2001. El fracaso ha beneficiado al PSOE que gana hasta 8 escaños respecto a las pasadas autonómicas. Al filo de las 10.30 de la noche, ya cerca del resultado final, los líderes de los partidos estaban desaparecidos. Ni una comparecencia. Cabe destacar el caso de José Blanco que pasó del triunfalismo al ostracismo en pocas horas. Se le esperaba en Santiago de Compostela pero se quedó en la sede madrileña de Ferraz. El avión no despegó.
Manuel Fraga fue el primero en dar la cara, diez minutos antes de las once de la noche. Fraga, consideró "razonable y viable" que el PP logre el escaño que le falta para lograr los 38 diputados con los que revalidaría, por quinta vez consecutiva, la mayoría absoluta, con el voto emigrante. Fraga explicó que el diputado que se juega en Pontevedra determinará la configuración del nuevo Ejecutivo gallego "donde la diferencia de los restos es muy pequeña", apuntó. "Ahí perfectamente podría producirse" –la mayoría absoluta–, arguyó, al tiempo que explicó que los populares lograrían ese escaño en detrimento del PSOE, ya que, en función de la ley D'Hont, el escrutinio favorece al partido más votado.
El jefe del Gobierno gallego adujo que el PP es "con diferencia el partido más votado" y aclaró que "queda todavía" el periodo de reclamaciones y, "sobre todo", el resultado del escrutinio de los residentes ausentes, que se resolverá el próximo día 27. Al ser preguntado sobre si de no conseguir el escaño que le otorgue la mayoría absoluta dejaría la política Fraga respondió: "Déjese usted de tonterías todos nos vamos a morir, y después de este resultado mi compromiso con Galicia es aún mayor".
Minutos después, compareció el secretario general del PP, Ángel Acebes, con un mensaje claro: "una vez más el PP ha ganado las elecciones en Galicia". Destacó Acebes que el voto del CERA (Censo de Españoles Residentes Ausentes) "nos podría dar el escaño 38". Agradeció a Manuel Fraga y a Mariano Rajoy la "magnífica campaña" del Partido Popular. Acebes ha resaltado asimismo que el PSOE es el "perdedor" de unas elecciones en las que ha recordado que el presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero, se ha volcado especialmente. El "número dos" del PP reseñó que "de las siete grandes ciudades de Galicia hemos ganado en seis" y añadió que el PP tiene el respaldo del "voto urbano y el voto rural". Acebes dijo que el PP consiguió "13 puntos más que el PSOE, el perdedor, 12 escaños más que el PSOE, el perdedor".
Cuando fue preguntado por la incidencia del voto de los emigrantes, Acebes explicó que "hay que esperar al recuento del voto emigrante, siempre hemos tenido muy buenos resultados y en Pontevedra en 2001 conseguimos muy buenos resultados, esperamos lograr el escaño el 38, en 2001 ganamos con mucha diferencia al PSOE y esperamos que así sea esta vez".
Emilio Pérez Touriño compareció a las once y cuarto de la noche: "Subimos 11 puntos y 8 escaños respecto a las elecciones anteriores. Las urnas pedían cambio y ha habido cambio", dijo el candidato socialista. Añadió que "la relación de fuerza abre las puertas a la alternancia democrática". En este sentido apunto que "nos corresponde que la voluntad se cumpla ese es mi compromiso y a ello dedicaré todas mis fuerzas desde este momento". Explicó Touriño que minutos antes había hablado con Anxo Quintana, el líder del BNG, "y los dos convenimos en cumplir el mandato popular. El resultado ajustado refleja la pluralidad". Entre los abucheos de los presentes, Touriño hizo un "reconocimiento de la figura de Manuel Fraga que fue un digno presidente durante 16 años y ahora tiene un apoyo que no vamos a negar". Concluyo apuntando que "a partir de ahora sólo hay ciudadanos de Galicia libres e iguales. Hoy es el primer día de nuestro futuro para mejorar Galicia y la vida de los gallegos".