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Espinosa dice ahora que las "aguas fecales" denunciadas por Narbona son de "depuradoras"

En la reunión del Consejo de Ministros que aprobó el trasvase del Tajo al Segura, Cristina Narbona defendió ante sus compañeros dicha medida porque en Murcia las huertas se estaban regando ya con "aguas fecales". Este hecho se conoció gracias a una filtración a El País. Elena Espinosa, presente en ese Consejo, ha esperado hasta este martes para explicar que "lo que ha querido transmitir (Narbona) es que en alguna zona concreta de España se está regando con agua de depuradoras, que no son fecales".  

(Libertad Digital) La responsable del ministerio de Agricultura, Elena Espinosa, ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad a los consumidores y al mismo tiempo otro para puntualizar las palabras de la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona: "Lo que ha querido transmitir es que en alguna zona concreta de España se está regando con agua de depuradoras, que no son aguas fecales".
 
Espinosa ha confirmado, en declaraciones a la Cadena SER, que existe una denuncia por parte de Finlandia de salmonela de lechuga de variedad de iceberg procedente de España, aunque ha aclarado que "con todos los expedientes abiertos hasta el momento, no podemos afirmar que sea por contaminación por un tema de riego". La ministra no ha querido descartar, además, que el caso de intoxicación alimentaria que Finlandia relaciona con el riego con aguas fecales de productos de la huerta murciana se haya producido "por una mala manipulación en el país de origen".
 
La ministra de Agricultura ha reiterado que el riego con aguas fecales, "se autoriza en proporciones determinadas previo análisis químicos por parte de las comunidades autónomas". Ante la alarma provocada por su compañera de Gobierno, Espinosa ha reiterado su mensaje de "tranquilidad" a los consumidores porque, ha dicho, "España es un ejemplo de trazabilidad alimentaria".
 
Las controvertidas declaraciones de Narbona llegaron tras la decisión del Consejo de Ministros de realizar el trasvase de 82 hectómetros cúbicos de agua del Tajo al Segura, lo que ya desató las críticas de los agricultores murcianos, que solicitaban 120 hectómetros cúbicos para sus regadíos. Al mismo tiempo esta medida enfrenta a Castilla-La Mancha y Murcia en un momento de grave sequía.  

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