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La CDU de Angela Merkel gana las elecciones en Alemania por un estrecho margen

Los primeros datos provisionales hechos públicos por el Gobierno alemán confirman la tendencia mantenida a lo largo de todo el escrutinio. La CDU ha ganado las elecciones por menos de un punto de diferencia con el socialdemócrata SPD. Traducido a escaños, los democristianos obtendrían 225 asientos en el Bundestag por 222 de los socialdemócratas. Los liberales se quedarían con 61, la extrema izquierda con 54 y Los Verdes con 51. Un nuevo mapa político en el que irrumpe con fuerza el partido de Lafontaine y se consolida el FDP como tercera fuerza política.

Los primeros datos provisionales hechos públicos por el Gobierno alemán confirman la tendencia mantenida a lo largo de todo el escrutinio. La CDU ha ganado las elecciones por menos de un punto de diferencia con el socialdemócrata SPD. Traducido a escaños, los democristianos obtendrían 225 asientos en el Bundestag por 222 de los socialdemócratas. Los liberales se quedarían con 61, la extrema izquierda con 54 y Los Verdes con 51. Un nuevo mapa político en el que irrumpe con fuerza el partido de Lafontaine y se consolida el FDP como tercera fuerza política.

(Libertad Digital) Mientras reina el caos político en Berlín y los líderes de los dos principales partidos dicen ser capaces de formar gobierno, la oficina electoral ha hecho público los primeros resultados provisionales. Las elecciones en Dresde han sido aplazadas hasta el próximo dos de octubre, es la única circunscripción que falta por escrutar. 

Victoria por la mínima

Los cristianodemócratas han conseguido el 35,2 por ciento de los votos, un porcentaje muy por debajo de las expectativas que los sondeos de la semana pasada habían creado entre la opinión pública. La candidata se presentó ante sus seguidores en la sede berlinesa del partido con un semblante serio y calificó los resultados como "decepcionantes" aunque remarcó que, a pesar de todo, su partido era el más votado. Compareció junto al presidente de Baviera, Edmund Stoiber, líder histórico de la CSU y candidato por la coalición conservadora en los comicios de 2002. Stoiber, que regresó a Munich a última hora de la noche de ayer, recordó que la verdadera fortaleza de la CDU/CSU reside en su región donde los demócrata-cristianos han obtenido casi el cincuenta por ciento de los sufragios. Junto a Baviera, feudo del CSU, los Estados federados de Baden-Württemberg, Renania-Palatinado y Sajonia han sido los que más han contribuido a la victoria de Merkel.

 

 

 

 

 

Triunfalismo en el SPD

En el otro lado, el todavía canciller Gerhard Schröder compareció ufano y con los brazos en alto a pesar de haber perdido la mayoría y de ser el candidato de la formación que más votos se ha dejado desde las elecciones de 2002 . Para el SPD, a quien los sondeos auguraban un histórico batacazo electoral, los resultados provisionales son una bendición. Schröder intervino en el programa de la ARD "Tras las elecciones" donde tuvo que ser amonestado por el presentador del espacio tras hacer gala de un desmedido triunfalismo ninguneando a la candidata conservadora.

Los grandes triunfadores de la noche han sido los liberales del FDP que se han situado, de nuevo, como la tercera fuerza política en Alemania. El partido liderado por Guido Westerwelle ha obtenido casi un diez por ciento de los votos, una histórica marca que no conseguían desde las elecciones de 1990, las anteriores a la reunificación. El candidato liberal, cuyo programa se centró en la rebaja de impuestos y la flexibilización de la economía, ha mostrado ya su intención de pactar con la CDU. Entre ambos, sin ambargo, no juntan los votos suficientes para consolidar una mayoría absoluta.

El partido que ha estado gobernando durante las dos últimas legislaturas junto al SPD ha perdido medio punto con respecto a las elecciones de 2002. Entonces obtuvo el 8,6 por ciento de los votos, en los comicios de este domingo se quedó en el 8,1por ciento. El partido Verde ha sido fuertemente cuestionado desde dentro y desde fuera por la alianza con los socialdemócratas y algunos de sus líderes, como el radical Jürgen Trittin, han sido protagonistas de más de un sonoro escándalo durante la última legislatura.

Cartel electoral de Die Linke en una ciudad alemanaDie Linke, la revelación

El partido de extrema izquierda fundado al alimón por Oskar Lafontaine y Gregor Gysi ha conseguido situarse como cuarta fuerza política del país con un 8,7 por ciento de los sufragios. Una cifra nada desprecieble teniendo en cuenta que el neocomunista PDS obtuvo sólo un 4 por ciento en las elecciones de 2002. La fuerza de Die Linke proviene de los Estados federados de la antigua RDA. En Brandemburgo, Sajonia-Anhalt y Turingia el partido de Lafontaine se ha colocado como segundo partido más votado con un más de cuarto de los sufragios en cada uno de los Estados. A pesar de su inesperado éxito, los dos principales partidos y el FDP ya han adelantado que no contarán con los izquierdistas para firmar pactos de legislatura.

La coalición CDU/CSU pasaría a tener 225 escaños por 248 que obtuvo en las elecciones de 2002. El SPD de Schröder 222 por 251 de los comicios anteriores. El liberal FDP sumaría 61asientos en el Bundestag, 14 más que en la última legislatura. Los Verdes con 51 escaños perderían 4 y Die Linke haría historia en el Parlamento alemán pasando de las dos plazas que ocupaba el antiguo PDS a los 54 escaños que habría obtenido en estas elecciones.

Partido

%       

Escaños
CDU 35,2 225
SPD 34,3 222
FDP 9,8 61
Linke 8,7 54
Grüne 8,1 51

Fuente: Statistisches Bundesamt

Elecciones en Dresde

La ciudad de Dresde, en la antigua Alemania del Este, no acudió ayer a las urnas por encontrarse de luto. Durante la campaña falleció de un infarto una candidata del derechista NPD y la junta electoral decidió aplazar las elecciones hasta el próximo dos de octubre. Dresde cuenta con 220.000 electores y envía a Berlín entre uno y tres diputad

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