L D (Agencias) La jefa de la Unión Cristianodemócrata (CDU), Angela Merkel, ha anunciado oficialmente este lunes un acuerdo con los socialdemócratas en el que se prevé que sea su partido (la CDE) el que dirija el próximo gobierno alemán. Si este acuerdo se aprueba en los congresos de ambos partidos, Merkel se convertirá en la primera mujer que ocupe la Cancillería alemana. La presidenta de la CDU ha dicho que ella "está lista" para luchar por los intereses de Alemania. Los dos partidos están dispuestos a formar coalición y podrán empezar a negociar la semana que viene, dado que todavía hay muchas diferencias, "como en Política Exterior", ha dicho Merkel, quien se ha referido concretamente a la política con Estados Unidos y Rusia.
La próxima canciller ha hablado en su comparecencia del periodo de reformas que se abre en Alemania. Merkel ha insistido en que la situación de la economía alemana y en especial el elevado número de parados necesitaban un acuerdo de este tipo que era además el único posible. La presidenta de la CDU ha indicado que representantes de ambos partidos, entre las que estará ella misma, negociarán las líneas fundamentales de actuación del nuevo Gobierno. Dicha actuación incluirá novedades que el nuevo Ejecutivo toma como un deber para que lleguen soluciones a la economía del país.
La agencia de noticias "dpa" informaba a primera hora de la mañana de que la jefatura del Gobierno alemán sería asumida por alguien de las filas conservadoras, según el acuerdo alcanzado entre el canciller, Gerhard Schroeder, y la líder de la Unión Cristianodemócrata (CDU), Angela Merkel. Los diarios alemanes ya abrían sus portadas con un "Merkel Kann Kanzlerin werden" (Merkel puede llegar a ser canciller). Según esas informaciones, el Partido Socialdemócrata Alemán (SPD) habría aceptado que sea la fuerza parlamentaria que más votos obtuvo en las elecciones la que designe al jefe de Gobierno. A cambio de ceder en esta cuestión –el SPD también reclamaba para sí la Cancillería–, la CDU habría hecho concesiones en otros puntos, y, por ejemplo, estaría dispuesta a hacer un reparto equitativo de los ministerios.
En este punto, en la prensa alemana se habla de la posibilidad de que, además del jefe de gobierno y el ministro de la cancillería, la CDU asuma cuatro ministerios y la CSU otros dos, lo que sumaría ocho cargos en el gobierno. El vicecanciller vendría de las filas del SPD, que obtendría ocho ministerios, entre ellos el de Exteriores, el de Finanzas y el de Trabajo. Schroeder y Merkel se han reunido con las cúpulas de sus respectivos partidos para presentarles los resultados de la reunión que mantuvieron este domingo. La reunión en cuestión, a la que asistieron Schroeder y el presidente del SPD, Franz Müntefering, así como Merkel y el líder de la CSU, Edmund Stoiber, duró tres horas y media, y concluyó cerca de la medianoche sin que trascendiera nada de lo abordado.
Desde España el líder de la oposición, Mariano Rajoy, ha mostrado su satisfacción por la noticia mientras desde el PSOE, Rafael Estrella, no ha felicitado a la próxima canciller alemana. Nada más conocerse los resultados de las elecciones en Alemania, el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, dio una rueda de prensa en Madrid en la que hizo un balance de comicios germanos. Según su análisis, los resultados de la SPD respondían a la "personalidad" de Schroeder que "ha aguantado mejor" las expectativas. En cambio, opinó que si se comparan los resultados con los datos de las últimas encuestas preelectorales, se puede constatar el "fracaso" del proyecto político de Merkel. Días después, el portavoz de CiU en el Congreso, Duran Lleida, le hizo una petición a Zapatero: "Le ruego que antes de hablar se lo piense".