(Libertad Digital) El Barcelona abre fuego en la 29ª jornada ante el Getafe este martes. Después de asestar un serio golpe a la Liga este fin de semana, ahora toca rematarla y olvidarse de las numerosas bajas que se trajo de San Sebastián, donde derrotó a la Real Sociedad (0-2). Nadie duda de que el equipo azulgrana es superior a los madrileños, pero Rijkaard ni sus jugadores se confían.
El miércoles se disputa el grueso de los partidos, donde están abiertos todos los frentes de lucha. Si el Getafe no obra el milagro en el Camp Nou, el Real Madrid debe empezar a pensar en asegurar la segunda posición para ahorrarse la ronda previa de la Champions. Además, el partido tiene morbo, ya que visita al Zaragoza. La última vez que pisó La Romareda, el equipo blanco se volvió a la capital con seis goles a la espalda, lo que supuso su eliminación de la Copa del Rey.
El Valencia, tercero en discordia, espera volver a ganar tras un mes sin sumar tres puntos en un partido. Además, la derrota de este domingo ante el Racing en Santander supuso el fin de una racha que duraba 16 jornadas. Su rival es un hueso duro de roer: el Villarreal. El duelo regional sirve de frontera entre los equipos que luchan por la Liga de Campeones y los que luchan por Europa. Los tres puntos son imperativo para ambos.
Los de Quique también tiene que mirar por el espejo retrovisor, ya que tiene al Osasuna pisándole los talones y con el intermitente puesto para adelantarles en la clasificación. El equipo de Javier Aguirre ya no lucha por la permanencia. Ahora quiere hacer historia y meterse en la Champions. La visita de la Real Sociedad no tiene por qué suponer una piedra difícil de saltar en su camino.
En apenas un margen de tres puntos hay cinco equipos que se pelean por las dos plazas de UEFA. El Sevilla y el Celta suman 45. Los andaluces se ven las caras el jueves ante el Atlético de Madrid, el que cierra este quinteto con 42. Los madrileños van como un tiro y ahora mismo sería un fracaso no clasificarse para Europa, cuando hace tan sólo unos meses peleaban por alejarse del descenso. En casa se muestran como un equipo difícil de ganar, por lo que el Sevilla sudará la gota gorda para apuntalar su quinta posición.
El Celta, por su parte, se mide al Alavés tras el varapalo sufrido en Balaídos ante el Athletic de Bilbao (0-1). El equipo vitoriano no tiene margen para el error y es el primer equipo con un pie en el borde del abismo, igualado con el Betis. El Deportivo, con 43 puntos, uno menos que el Villarreal, vuelve a enfrentarse a los fantasmas de Riazor, aunque su rival de este miércoles, un Málaga tocado y hundido, tiene todas las papeletas para ser quien espante los malos espíritus. El Zaragoza y el Getafe actúan de limbo entre el cielo y el infierno.