L D (Agencias) El Estatuto balear quedó aprobado "in extremis" a las 21:30 horas del martes en la Cámara Autonómica, pese a que a media mañana todavía planeaba la duda entre los partidos de la oposición sobre si el PP iba a retirar el texto del Parlamento, tal y como advirtió ante la ausencia de consenso con el principal partido de la oposición en temas primordiales, informa Europa Press.
Sin embargo, hacia las 15:30 horas y contra todo pronóstico, el presidente del Gobierno balear, Jaume Matas, y el secretario general del PSIB, Francesc Antich, anunciaron, tras mantener un despacho para fijar posturas de última hora, la disposición de votar favorablemente a la reforma del Estatuto, un acuerdo que fue posible, en gran medida, gracias a la renuncia del PP a la introducción en el texto de un nuevo Régimen Especial para Baleares (REB), y del PSIB a reclamar la obligatoriedad del catalán.
Así, minutos después de arrancar el debate, el jefe del Ejecutivo balear solicitó al presidente del Parlamento, Pere Rotger, intervenir ante la Cámara para manifestar su voluntad de aprovechar esta oportunidad histórica para aprobar la reforma del Estatuto, a la vez que pidió "lealtad en el Congreso" al primer partido de la oposición, al que dio un "voto de confianza" a cambio de "nada", resaltó.
Autogobierno y competencias
El texto estatutario introduce mejoras sustanciales en materia de financiación, nivel de autogobierno y grado competencial, y contempla la posibilidad de que algunos de los acuerdos alcanzados sean modificados en el Congreso, "siempre y cuando prime el consenso", tal y como señalaron Matas y Antich.
Así, el nuevo Estatuto recoge el deber del Estado de destinar a la Comunidad Autónoma en un plazo de diez años la cantidad de 3.000 millones de euros en compensación por el "déficit histórico" que arrastra Baleares. Se trata de la demanda formulada inicialmente por el PP y enmendada por el PSM, a la que el PSIB no fue favorable, pero accedió a incorporarla en el Estatuto con la condición de que pueda negociarse en el Congreso.
Según palabras del presidente Matas, "la financiación queda supeditada a la existencia de un consenso superior en el Congreso, con fórmulas garanticen la llegada de los 3.000 millones de euros".
La financiación ha sido la cuestión que más discrepancias suscitó durante las reuniones de la Ponencia para la reforma del Estatut, en las que los populares siempre recriminaron al PSIB el querer utilizar la "fórmula catalana" en lugar de defender "lo mejor para Baleares". La propuesta del PSIB en financiación pasa por solicitar al Estado un volumen de inversiones proporcional a la contribución de Baleares al PIB nacional (2,5 por ciento) por un plazo, también, de diez años.
Renuncia al REB
Por otra parte, el aras al consenso con el Partido Socialista, el PP accedió a renunciar a la introducción de un nuevo Régimen Especial para Baleares (REB) que debía garantizar unas ventajas fiscales y una reserva de inversiones para Baleares. Desde el principio, el PSIB mostró su rotunda oposición a esta propuesta, arguyendo que Madrid "nunca lo aceptaría".
Asimismo, el PP defendió hoy el derecho de reabrir esta demanda durante la tramitación del texto en el Congreso, una petición que aceptó el líder de la oposición. Por otra parte y como contrapartida, el PSIB aceptó la inclusión de la "Cláusula Matas", por la cual se solicitará al Estado la equiparación de Baleares y Canarias excepto en las cuestiones relativas a la ultraperifericidad.
Además, en materia lingüística PP y PSOE acordaron dejar inalterado el título tres del texto estatutario, que es idéntico a la consideración que recibe la lengua catalana en el Estatut balear vigente (1983), y que no contempla la obligatoriedad o el deber de conocer el catalán, una solicitud formulada por el PSM y que contó en un momento de las negociaciones con el apoyo del PSIB, que hoy se echó atrás.
Consejo de Formentera
Acerca del otro punto de enorme discordancia, el texto mantiene "intacta" la propuesta tal y como quedó redactada por la Comisión, lo que se traduce en el compromiso del Gobierno balear a negociar con el Ayuntamiento de Formentera el traspaso de competencias para la creación del nuevo Consell, además de establecer la necesidad de constituir la futura Institución Insular a través de una Ley en el Parlamento.
Sobre este asunto, Matas y Antich acordaron que "no se modificará" en el Congreso y se comprometieron a que la creación de la nueva Institución Insular será una realidad "antes de la celebración de las elecciones autonómicas" y el traspaso competencial se realizará de "forma inmediata" tras la aprobación del Estatut en Madrid.
Asimismo, el Estatuto también introduce mejoras en las relaciones bilaterales entre el Estado y Comunidad Autónoma; exige una mayoría cualificada para modificar la Ley de Consejos Insulares; establece que las competencias propias de los Consejos Insulares y su financiación se decidirán en la Ley de Régimen Local; además de reconocer un título de Derechos y Deberes.
Al Congreso
Así, el próximo lunes día 19 de junio el presidente del Parlament balear entregará directamente en mano a su homólogo en el Congreso de los Diputados, Manuel Marín, el texto estatutario, que será defendido en la Cámara Baja por el presidente del Govern, Jaume Matas (que asistirá en calidad de diputado), la diputada socialista, Francina Armengol, y el diputado del Grupo Mixto (UM) , Miquel Nadal. Está previsto que la reforma se publique este jueves en el Boletín Oficial del Parlamento de Baleares (BOPIB).