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Varias personas distintas de los islamistas vivieron en Morata unos días antes del 11-M

La casa de Morata de Tajuña hospedó a varias personas ajenas a los islamistas los días previos a los atentados. Según informa El Mundo, Jamal Ahmidan, el Chino, les dijo a sus cómplices que iba a vivir en la casa, por unos días, una familia con hijos, y les instó a que no aparecieran por allí durante su estancia. Sin embargo, en ese periodo, clave para los atentados, ya se encontraba en el lugar la dinamita para organizar la masacre y el día de su marcha se prepararon las bombas, lo que sugiere que esos desconocidos intervinieron en la masacre. También en esos días, dos personas de "aspecto occidental" compraron, entre otros, el teléfono Trium de la mochila de Vallecas.

La casa de Morata de Tajuña hospedó a varias personas ajenas a los islamistas los días previos a los atentados. Según informa El Mundo, Jamal Ahmidan, el Chino, les dijo a sus cómplices que iba a vivir en la casa, por unos días, una familia con hijos, y les instó a que no aparecieran por allí durante su estancia. Sin embargo, en ese periodo, clave para los atentados, ya se encontraba en el lugar la dinamita para organizar la masacre y el día de su marcha se prepararon las bombas, lo que sugiere que esos desconocidos intervinieron en la masacre. También en esos días, dos personas de "aspecto occidental" compraron, entre otros, el teléfono Trium de la mochila de Vallecas.
(Libertad Digital) Según explica el diario El Mundo, dos documentos en el sumario que instruye el juez Del Olmo atestiguan la presencia de desconocidos en la casa en los días previos a la matanza. Uno de ellos es una grabación policial entre El Chino y Otman Gnaoui, en que Ahmidan le habla de "un señor con su familia y sus hijos" que ocuparía la casa de Morata a partir del 3 de marzo.
 
El otro elemento que se refiere a estas personas es una declaración de Hamid Ahmidan, primo de El Chino, en la Comisaría General de Información. El detenido habla de los coches que había en la casa y relata cómo su primo le impidió entrar en la casa porque "estaba con gente", y cómo le instaba a no venir porque "iba a estar una mujer allí sola con sus hijos".
 
Las fechas de la estancia de esa supuesta familia, relata El Mundo, fueron claves para la preparación de los atentados. El 3 de marzo, la dinamita ya estaba en Morata. El diez, se prepararon las bombas. Por ello, parece evidente que esas personas a las que no tuvieron acceso los colaboradores de El Chino formaron parte de la preparación de la masacre. Según explica el diario, Ahmidan no dejaría "a alguien que no tuviera que ver con los atentados" en una casa con un zulo de fácil acceso lleno de explosivos.

El diario también recuerda que la propia Policía conoce el hecho de que desconocidos estuvieron en algún momento en la casa, puesto que se han encontrado huellas que no pertenecen a ninguno de los imputados. En las fechas en que tuvo lugar la presencia de estos desconocidos, recuerda el diario, dos individuos sin identificar, y de "aspecto occidental", según los testigos, adquirieron unos móviles liberados. Entre ellos, el de la mochila de Vallecas.

La relación de "El Chino" con ETA
 
El Mundo recuerda también este lunes que hay un total de cuatro vínculos de El Chino con la banda terrorista ETA, que se contemplan en el sumario. En primer lugar, la conversación entre Rafá Zouhier y un guardia civil, grabada por la UDYCO, en que el islamista habla hasta en tres ocasiones de la relación de El Chino con el País Vasco. Otro de los vínculos es una conversación de Trashorras y un miembro del CNI: el ex minero aseguró que El Chino conocía a uno de los etarras detenidos en Cuenca cuando desplazaban 500 kilogramos de explosivos.

Omar, hombre de confianza de El Chino, reveló en una entrevista para El Mundo, que Ahmidan tuvo contacto con presos de ETA en la cárcel de Carabanchel. Y, por último, la mujer de Ahmidan aseguró que la noche del 11-M, El Chino le comentó a uno de sus hijos que "los de ETA se han pasado" en relación a la masacre.

Los trabajos paralelos de El País y ABC
 
El diario de Prisa y el de Vocento han llevado, de nuevo, el tema del 11-M a su portada con el fin de deslegitimar datos de la investigación independiente de Libertad Digital y El Mundo. El País aporta un informe del comisario Miguel Ángel Gamonal, que se envió al juez instructor, según el diario, cuando El Mundo reveló que Trashorras tuvo relación con los etarras detenidos en Cuenca. El diario de Prisa enfatiza que Gamonal "era el brazo derecho" de Jesús de la Morena, Comisario general de Información y "de la máxima confianza" de Mayor Oreja. Ese dato lo lleva también al titular: "La cúpula policial del PP desmiente en un informe la versión de Trashorras sobre ETA".

ABC prefiere arremeter contra Lavandera y su intento de asesinato en Gijón. El diario habla con rotundidad del "fingido tiroteo contra Lavandera" basándose en un escrito de conclusiones de la Guardia Civil y la Policía de Asturias. El diario reproduce íntegramente el documento, en el que se aseguran, entre otras cosas, que "no hay evidencias" y que los disparos se hicieron con el vehículo detenido.

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