Menú

Vera adelantó al PSOE las detenciones de islamistas desde un despacho que le proporcionó Rodríguez Ibarra

La última revelación de El Mundo sobre el 11-M pone nombre a la persona que fue adelantando al PSOE los pasos que daba la Policía en las horas inmediatamente posteriores al 11-M. Casimiro García Abadillo desvela que fue Rafael Vera, ex secretario de Estado para la Seguridad, el que informaba telefónicamente a la dirección socialista. Lo hacía, apunta, desde un despacho que puso a su disposición el presidente de la Junta de Extremadura. Desde ahí, el 12 de marzo ya trasladó al PSOE que al día siguiente habría detenciones de islamistas. Su fuente, según el propio ex secretario de Estado, era la juez antiterrorista francesa Laurence Levert.

La última revelación de El Mundo sobre el 11-M pone nombre a la persona que fue adelantando al PSOE los pasos que daba la Policía en las horas inmediatamente posteriores al 11-M. Casimiro García Abadillo desvela que fue Rafael Vera, ex secretario de Estado para la Seguridad, el que informaba telefónicamente a la dirección socialista. Lo hacía, apunta, desde un despacho que puso a su disposición el presidente de la Junta de Extremadura. Desde ahí, el 12 de marzo ya trasladó al PSOE que al día siguiente habría detenciones de islamistas. Su fuente, según el propio ex secretario de Estado, era la juez antiterrorista francesa Laurence Levert.
(Libertad Digital) El ex secretario de Estado para la Seguridad en los Gobiernos de Felipe González, condenado por el secuestro de Segundo Marey y por robar los fondos reservados, fue quien transmitió al PSOE, con antelación, que se iban a producir las primeras detenciones de islamistas. Se le anticipó a la dirección socialista la noche del 12 de marzo tras la manifestación que recorrió bajo un aguacero el centro de Madrid.
 
Cuando terminó la marcha, según desvela El Mundo, varios dirigentes del PSOE se reunieron en la sede socialista de la calle Gobelas y pasadas las nueve de la noche de ese 12-M acudieron a cenar al restaurante La Hacienda, muy cerca "del cuartel general socialista".
 
Una sucesión de llamadas al PSOE
 
Cenaban Alfredo Pérez Rubalcaba, José Blanco, Miguel Ángel Sacaluga, consejero de RTVE, y los miembros del comité electoral Oscar López, Nacho Varela y César Mongo. A lo largo de la cena fueron muchas las llamadas que recibieron con noticias sobre la masacre, ente ellas, matiza Casimiro García Abadillo, la de Margarita Robles. La que fuera secretaria de Estado de Interior con Juan Alberto Belloch, ahora magistrada de la Audiencia Nacional, transmitió a José Blanco que "sus fuentes en el entorno abertzale le aseguraban que ETA no había tenido nada que ver en el atentado". Entre las llamadas que recibió Rubalcaba estaba la de la ex ministra portavoz Rosa Conde.
 
Pero, concreta la información del diario que dirige Pedro J. Ramírez, "la llamada que más congratuló a los comensales fue la de Rafael Vera. De hecho, estaban seguros de que, de ser cierto lo que decía el ex responsable de Seguridad, el PSOE ganaría las elecciones que habían de celebrarse el 14 de marzo, apenas 36 horas después de la premonitoria confidencia". Vera acababa de transmitirles desde Mérida que se iban a producir las primeras detenciones de islamistas, algo que ocurrió al día siguiente.
 
Los mensajes y las pancartas del cerco espontáneo
 
Ese 13 de marzo por la mañana miles de mensajes convocaban al cerco de las sedes del PP. Manifestaciones espontáneas, se encargó de difundir el PSOE, en las que se repetía siempre la misma pancarta elaborada. Apunta García Abadillo que "la movilización de los dirigentes socialistas para recabar datos sobre la autoría del atentado, sobre todo los que habían tenido responsabilidades en Interior, había sido inmediata".
 
Vera estaba en Mérida porque en la misma mañana del 11-M, cuando ya se había puesto a disposición del partido, había pedido a su amigo y presidente de la Junta de Extremadura que le facilitara los medios para poder realizar todas las gestiones. Sostiene El Mundo que "no se fiaba de su teléfono porque sospechaba que podía estar controlado por la Policía". Rodríguez Ibarra puso a disposición del ex número dos de Interior un despacho y un teléfono seguros para que instalara allí su "improvisado centro de operaciones".
 
Vera en Mérida, Barrionuevo y Corcuera con Galindo
 
Mientras el ex secretario de Estado se trasladaba a Mérida, dos ex ministros del Interior, José Barrionuevo y José Luis Corcuera, acudían a la cárcel toledana de Ocaña II para visitar durante tres horas al general de la Guardia Civil Enrique Rodríguez Galindo. Esa el mismo 11-M se sumaba a las que se venían sucediendo desde que Galindo fue condenado a 75 años de cárcel por los asesinatos de Lasa y Zabala. Esta vez faltaba Vera, habitual en esos encuentros.
 
Recuerda el diario que pese a su ingreso en prisión, Rodríguez Galindo "seguía teniendo buenos contactos" en la Guardia Civil. El responsable de la Unidad Central Operativa, Félix Hernando, está encausado por haber llevado dinero en maletines a Suiza, por orden de Rafael Vera, para pagar el silencio de las esposas de José Amedo y Michel Domínguez. Y apunta que "uno de los confidentes de la UCO era Rafá Zouhier, quien había advertido a sus controladores sobre la llamada trama asturiana de la dinamita y quien, tras los atentados del 11 de marzo, dio la pista clave sobre el domicilio de El Chino".

Temas

En España

    0
    comentarios