L D (Agencias) La reunión de Zapatero con la cúpula de Interior ha dado a luz la nueva estrategia del Ejecutivo tras el comunicado de la banda terrorista ETA. Pese a que el discurso del presidente del Gobierno ha sido un ejercicio de ambigüedad más de cara a la galería abertzale que al pueblo español, más a sus votantes que al conjunto de los ciudadanos, algunos miembros de su Gabinete se han encargado de despuntar con medidas de aparente dureza.
Dos ejemplos: Alfredo Pérez Rubalcaba, ministro del Interior y Joan Mesquida, director del Mando Único (Policía Nacional y Guardia Civil). Cuando ETA mantenía sobre el papel su alto el fuego –sorprendentemente los dos muertos de la T-4 nunca se colocaron como una ruptura– Mesquida llegó a decir que los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado tenían problemas para reconocer al enemigo; un estado idílico de paz en el que parece que nuestros agentes sólo se dedicaban a regular el tráfico. Pero eran muchos los avisos, desde Francia y en España, que alertaban de la actividad terrorista. Tras el comunicado, Mesquida lanza el mensaje de que las Fuerzas de Seguridad jamás han estado en tregua.
El ministro del Interior dejó claro que el etarra De Juana cumpliría su prisión atenuada en su domicilio hasta recuperarse del todo. Por eso se hizo famosa la pulsera telemática, que es una medida de control en libertad. Ahora, tras días de silencio ante el alta médica del asesino, parece indignarse porque no le hayamos entendido bien su firmeza y repite machaconamente que De Juana no se irá a su casa, eso sí, tampoco dice que su destino sea la cárcel.
En declaraciones a Telecinco, recogidas por Europa Press, Rubalcaba reveló que este martes por la mañana dos médicos de la Dirección General de Instituciones Penitenciarias se han reunido con los profesionales que tratan al terrorista de ETA "para conocer cuál es su estado de salud" y que en las próximas horas emitirán un "un dictamen completo". Curioso día para hacer el chequeo.
El siguiente paso, explicó el ministro, será que Interior tome una decisión, "ajustada a la Ley y de acuerdo con el juez de Vigilancia Penitenciaria", José Luis de Castro. En ese punto de la entrevista, Rubalcaba añadió: "Le quiero decir una cosa para que quede clara: el señor De Juana no va a ser trasladado a su domicilio cualquiera que sea el dictamen médico que nos proporcionen los equipos que están trabajando en este momento. En ningún caso será trasladado a su domicilio. Eso se lo puedo garantizar, quiero que quede esta noche absolutamente claro".
Críticas al PP
Rubalcaba dijo que el Partido Popular ha hecho algo "insólito en democracia", que es responsabilizar al Gobierno de la ruptura de alto el fuego por ETA. Rubalcaba dijo que los españoles saben que el PP no ha echado "ninguna mano" al Ejecutivo en los 14 meses que ha durado el alto el fuego, pero se mostró partidario de no "echar la vista atrás" y pidió "un esfuerzo de responsabilidad" a los 'populares'.
Explicó que ese "esfuerzo de responsabilidad" consiste en hacer lo mismo que, a su entender, hicieron los socialistas cuando la banda terrorista rompió la tregua de 1999: "apoyar al Gobierno y fortalecer el Estado de Derecho".
Por otra parte, el ministro dijo que las Fuerzas de Seguridad no han bajado la guardia durante la tregua y que prueba de ello son las 92 detenciones que se han producido en este periodo de tiempo. "El resto son especulaciones", añadió. Asimismo, Rubalcaba incidió en que en 40 años, ETA "no ha conseguido nada" con la violencia y adelantó que, de ahora en adelante, tampoco lo va a conseguir. En este sentido, dijo asumir su responsabilidad de "garantizar la seguridad de los españoles" y prometió dedicarse a ello "en cuerpo y alma".Una decisión personal
Rubalcaba fue el encargado de anunciar la concesión de la prisión atenuada a De Juana Chaos hace dos meses. Fue una "decisión personal", según dijo el ministro porque el etarra moriría en pocas semanas si seguía con la huelga de hambre. Así que le trasladó de Madrid a San Sebastián con mimo y cuidado. Dejó claro que una vez el asesino se recuperara, se marcharía a casa. Enumeró durante su comparecencia las "razones humanitarias" que le habían llevado a tomar esa decisión. "A nosotros nos importa la vida", sentenció.
El ministro del Interior explicó el pasado 1 de marzo, el día en que De Juana fue trasladado a San Sebastián, que el etarra iba a "cumplir su condena en régimen atenuado, dado su grave estado de salud, para evitar su fallecimiento y para tratar de que se recupere". Después, "si es posible", dijo, sería enviado a su domicilio "hasta el restablecimiento".
Instituciones Penitenciarias ha mantenido que el alta hospitalaria no le había sido comunicada por el hospital desde el pasado viernes, día en que apareció la noticia. Una vez concedida el alta hospitalaria, el etarra puede abandonar el centro médico y se presentarían dos opciones: esperar a recibir el alta médica en su domicilio, controlado telemáticamente, o ser enviado a la enfermería de una prisión hasta que se recupere totalmente.
Cuando reciba el alta médica, según fuentes jurídicas, Instituciones Penitenciarias tiene la "obligación legal" de reconsiderar la situación del preso, lo que podría suponer desde la aplicación del tercer grado penitenciario –sólo ir a prisión a dormir– hasta su traslado de nuevo a prisión en segundo grado. Esta noche, sin embargo, el ministro del Interior ya aclaró que en ningún caso será conducido a su domicilio.
En todo caso, si llega el próximo 28 de agosto sin que la situación médica del etarra De Juana haya cambiado deberá reconsiderarse igualmente su situación, al haber transcurrido seis meses desde que le fue aplicado el artículo 100.2 del Reglamento Penitenciario.
Este artículo establece que "con el fin de hacer el sistema más flexible, el Equipo Técnico podrá proponer a la Junta de Tratamiento que, respecto de cada penado, se adopte un modelo de ejecución en el que puedan combinarse aspectos característicos de cada uno de los grados, siempre y cuando dicha medida se fundamente en un programa específico de tratamiento que de otra forma no pueda ser ejecutado. Esta medida excepcional necesitará de la ulterior aprobación del Juez de Vigilancia correspondiente, sin perjuicio de su inmediata ejecutividad".
De Juana ha trasladado a su entorno, durante su estancia en el Hospital Donostia de San Sebastián, que está dispuesto a regresar a la huelga de hambre si Instituciones Penitenciarias le coloca una pulsera de control telemático de regreso a su domicilio, informaron a Europa Press fuentes de la lucha antiterrorista.
Alcaraz: "Una coartada de cara a la ciudadanía"
El presidente de la AVT, Francisco José Alcaraz, calificó como "una coartada de cara a la ciudadanía" las declaraciones de Rubalcaba, en las que dijo que el etarra De Juana Chaos no volverá a su domicilio. "En el proceso que queda de aquí a las elecciones generales el Gobierno va hacer algunos gestos para justificar como una coartada de cara a la ciudadanía que está acatando la ley, pero va a haber otros muchos en los que no lo va a hacer", expresó Alcaraz en declaraciones a Europa Press.
El presidente de la AVT vaticinó que "de aquí a las elecciones generales, el Gobierno llevará a cabo gestos que utilizará de cara a la ciudadanía" como es el de asegurar que De Juana no volverá a su casa. No obstante, Alcaraz pidió al Ejecutivo "gestos reales de un cambio en su política antiterrorista como la ilegalización del PCTV, el cese del fiscal general del Estado, Cándido Conde Pumpido, o claridad a la hora de poner fin a su proceso de negociación con ETA".
En este sentido, el presidente de la AVT mostró su deseo de que el peso etarra "vuelva a la cárcel en la que se encontraba" antes de ser ingresado en el Hospital Donosti de San Sebastián y aseguró que las declaraciones de Rubalcaba "no se habrían producido en caso de que ETA no hubiese puesto fin a su alto el fuego". "ETA va a tensar la cuerda hasta el final pero nunca va llegar romperla porque ETA, para que siga adelante su proceso, necesita el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero", sentenció.
En este sentido, el presidente de la AVT mostró su deseo de que el peso etarra "vuelva a la cárcel en la que se encontraba" antes de ser ingresado en el Hospital Donosti de San Sebastián y aseguró que las declaraciones de Rubalcaba "no se habrían producido en caso de que ETA no hubiese puesto fin a su alto el fuego". "ETA va a tensar la cuerda hasta el final pero nunca va llegar romperla porque ETA, para que siga adelante su proceso, necesita el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero", sentenció.