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COMO EL ÉXTASIS LÍQUIDO

El Samur recoge a seis hombres en Madrid por sobredosis de drogas de diseño

Seis hombres, de entre 30 y 40 años, fueron atendidos esta madrugada en diferentes puntos de Madrid con sobredosis por drogas de diseño, algunos por éxtasis líquido, e ingresados "graves" en varios hospitales. La misma fuente indicó que es "infrecuente" que las dotaciones sanitarias del Samur-Protección Civil tengan que asistir en una sola madrugada a tantos afectados por sobredosis de estas drogas.

Seis hombres, de entre 30 y 40 años, fueron atendidos esta madrugada en diferentes puntos de Madrid con sobredosis por drogas de diseño, algunos por éxtasis líquido, e ingresados "graves" en varios hospitales. La misma fuente indicó que es "infrecuente" que las dotaciones sanitarias del Samur-Protección Civil tengan que asistir en una sola madrugada a tantos afectados por sobredosis de estas drogas.
LD (EFE) Los atendidos, que eran holandeses, ingleses y españoles, presentaban inconsciencia, hipertensión, en algunos casos convulsiones, y dificultad respiratoria y cuatro de ellos tuvieron que ser intubados. Todos ellos fueron atendidos en la vía pública y por el centro de Madrid, concretamente en las calles Paseo Virgen del Puerto, Plaza de las Descalzas, Calle Trujillo, Barceló y Atocha.
 
Según una investigación realizada por el Instituto Médico Johns Hopkins de Baltimore, y que fue presentada recientemente en Madrid, El éxtasis se consume tanto como la cocaína, aunque sus efectos -menos estudiados- son más peligrosos.
 
Una droga "muy popular"
 
En la apertura del I Congreso Nacional sobre Drogodependencia, titulado "Las drogas, una realidad cambiante", el profesor Ricaurte expuso los resultados de su trabajo sobre las consecuencias neurológicas del éxtasis o MDMA. Entre sus principales conclusiones destaca que esta droga destruye parte de las neuronas que producen la serotonina (hormona transmisora del sistema nervioso).

El éxtasis se ha convertido en una droga "muy popular en todo el mundo, consumida principalmente por los adultos jóvenes (19-28 años) en las grandes fiestas, para aguantar despiertos toda la noche", explicó.
 
Ricaurte explicó que, "con muy pocas dosis se produce daño neurológico y existen efectos secundarios graves", como hipertensión, convulsiones, psicosis o arritmia cardiaca.
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