L D (EFE) Estaba previsto que el vuelo 104 de Blue Air a Bucarest saliera de Barajas a las 11.00 horas, pero sufrió una demora debido a causas operativas. Cuando los pasajeros iban a embarcar, la compañía les comunicó que no irían todas las maletas en el avión debido a la falta de capacidad de la bodega de la aeronave, por lo que los viajeros se negaron a subir al aparato.
En la plataforma del aeropuerto protagonizaron una protesta que obligó a personarse a la Guardia Civil, que no llegó a intervenir, hasta que el comandante de la aeronave les aseguró que "los equipajes llegarían a Rumania en el siguiente vuelo". AL final el aparato despegó de Barajas a las 15.30 horas.
Más problemas con un vuelo a Amsterdam
Casi en paralelo, más de un centenar de viajeros de una ruta de KLM a Amsterdam protagonizaron otra protesta. Fue sobre las 13.00 horas en la puerta de embarque del vuelo por "una nueva demora en la salida del mismo", que estaba programado para las 13.30 horas de este sábado. De nuevo tuvieron que hacer acto de presencia agentes de la Guardia Civil.
Los pasajeros explicaron que en la tarde del sábado fueron embarcados a la hora prevista, pero les comunicaron que tenían que abandonar la aeronave porque había un problema en el tren de aterrizaje delantero y que los responsables de la aerolínea iban a tratar de solucionar.
Sobre las 18.00 horas fueron embarcados de nuevo en la aeronave y, según su testimonio, el comandante del avión se negó a despegar porque consideraba que el aparato no estaba en condiciones para realizar el vuelo. Llegó a comentar a algunos viajeros, según sus testimonios, que "mejor en la tierra que en el cielo". Los 170 viajeros de esta ruta fueron trasladados a hoteles y regresaron a las 11.00 horas de este domingo al aeropuerto.
"Vimos que el comandante estaba mirando las ruedas del tren de aterrizaje" y nos informaron de un nuevo retraso, por lo que comenzaron a protestar y a presentar reclamaciones.
Protestas de los pasajeros de Vueling
También presentó reclamaciones un grupo de 35 viajeros de una ruta de Vueling a París que no pudieron viajar a su destino en un vuelo programado para las 12.35 horas debido a que la compañía tuvo que reducir el número de viajeros por "una restricción operativa en una de las cuatro rampas del avión".
El avión, un Airbus 320, con capacidad para 150 viajeros despegó hacia su destino con 115 viajeros y el resto voló en otra ruta de la compañía a las 18.45 horas.