L D (Europa Press) En una rueda de prensa en Sevilla, Benigno Blanco aludió a preguntas de los periodistas al dirigente popular, quien ayer comentó que no ejercerá la objeción, expresando su "gran confianza" en que en el colegio religioso que ha elegido para sus hijos "no van a recibir doctrina ni ideología política, ni la de Rodríguez Zapatero ni la mía".
A este respecto, el presidente del Foro dijo que respeta "a Arenas y lo que decida hacer, como al resto de padres", si bien, le instó a "reflexionar" sobre la posibilidad de ejercer este "derecho constitucional" apelando a "la solidaridad con el resto de familias, ya que no se objeta contra el centro escolar de un hijo, sino contra una norma jurídica".
15.000 contra 68
De otro lado, Blanco afirmó que su organización tiene contabilizadas 15.000 objeciones presentadas en toda España, 1.700 de ellas en Andalucía. En cuanto a las cifras dadas ayer por la consejera de Educación, Cándida Martínez, quién situó en 68 las solicitudes de objeción, el presidente del Foro lamentó que "tiene menos información que nosotros, lo cual es preocupante".
Igualmente, pidió a la Junta que "no engañe a las familias, porque EpC no trata sólo los derechos humanos, la Constitución, las instituciones democráticas y la participación social, como ocurre en el resto de países europeos que tienen esta asignatura, sino que además pretende formar la conciencia moral".
Derecho fundamental
Blanco aseguró que el Foro de la Familia acudirá al Tribunal Constitucional y al de Tribunal Europeo de los Derechos Humanos si la administración niega el "derecho fundamental" a objetar y obliga a los niños a entrar en las clases, algo que sería "un delito".
De igual modo, recurrirá a la Justicia en caso de que a los estudiantes que no quieran cursar la materia queden penalizados escolarmente y no se les dé el título. A este respecto, recordó que se querellaron contra la Delegación de Educación de Toledo por un delito, "impedir y coaccionar" el ejercicio de la objeción de conciencia.
Blanco explicó que los centros escolares tendrán que hacerse cargo de los niños que objeten a la asignatura durante la hora en que quedan libres, y añadió que su entidad no va a inmiscuirse en cómo lo hagan. En este sentido, precisó que "por lealtad a la administración" piden a los padres que comuniquen a sus delegaciones de Educación que van a objetar, "algo que no tendría ni que hacerse".
No es política, es familia
Blanco reiteró que esta oposición a EpC "no es un tema político ni de partidos, sino un enfrentamiento entre las familias y el Gobierno". En esta línea, pidió una "rectificación pública" a la ministra y la consejera del ramo, Mercedes Cabrera y Cándida Martínez, respectivamente, por la "falta de sensibilidad".
Por último, recordó que la objeción de conciencia se puede ejercer en defensa del pluralismo, de la libertad ideológica y religiosa y de la libertad de educación y el derecho de las familias a educar a sus hijos conforme a sus convicciones morales, según recoge la Constitución.