(Libertad Digital) El ministro del Interior de Chad, Ahmat Mahmat Bachir, afirmó hace 10 días que podrían ir a la cárcel los seis ciudadanos franceses de la ONG L'Arche de Zoé que fueron detenidos el pasado jueves por intentar trasladar a Francia a 103 niños de Chad en un avión de la compañía española Girjet, cuya tripulación, siete españoles, fueron y siguen, tres de ellos, retenidos en el país africano. En declaraciones a la cadena pública británica BBC, Bachir comunicó que todos comparecerán ante un juez por presunto secuestro de menores para su adopción por familias europeas.
"(Los seis miembros de la ONG) hicieron visados falsos, lo que significa que falsificaron documentos. Para nosotros, el rapto es más que un delito. (Los seis detenidos) podrían ser encarcelados durante varios años", afirmó el ministro chadiano. Los seis arrestados -insistió Bachir- "cometieron un delito en Chad, por lo que, por supuesto, serían encarcelados en Chad. Eso es muy probable". L'Arche de Zoé, por su parte, negó los cargos y subrayó que los niños son huérfanos procedentes de la maltrecha región sudanesa de Darfur. En este sentido, la delegada en Chad del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Annet Rehrl, afirmó que ninguno de los 103 niños que la ONG francesa intentó trasladar a Francia, era huérfano y denunció que las personas detenidas de la organización "hicieron de todo", incluso "poner vendajes falsos a los niños" para que parecieran más desvalidos de lo que realmente estaban.
Un día después, fuentes españolas de Exteriores señalaron que era "difícil" hacer más de lo que ya se ha hecho para desbloquear la situación de los siete españoles retenidos en Chad e informó de que "la situación" estaba "en manos de las autoridades judiciales" chadianas. Hoy, una semana después, cuatro de los siete españoles detenidos ya vuelan de regreso a casa en el avión presidencial de Sarkozy, La mediación diplomática del inquilino del Elíseo ha sido lo que ha facilitado la liberación, la de las cuatro azafatas, por el momento.
Cronología del "plan" humanitario
Seis personas esposadas y sietes españoles aterrorizados. Este era el panorama dos días después de que el Gobierno africano de Chad tomara como rehenes a una tripulación española y a una ONG francesa, acusados de adopción ilegal. Durante esa jornada, sábado 27 de octubre, el presidente chandiano, Idriss Deby, aseguró que los culpables serían llevados a la Justicia y castigados.
Las cadenas France2 y LCI mostraban una filmación en la que se veía a la tripulación española del avión que debía trasladar desde Chad a Reims (Francia) a 103 niños africanos, en una operación montada por la ONG francesa L'Arche de Zoé que fue abortada por las autoridades chadianas, por considerar que se trata de un secuestro de menores.
Luego se veía a Idriss Deby asegurar que hay personas que secuestran a niños africanos para "entregarlos a pederastas en Europa, venderlos o matarlos". "Todos los que hayan participado en esta acción, chadianos o no, serán llevados a la Justicia y castigados", aseguró el mandatario a la tripulación española.
Reproducción de la tensa conversación
"Usted forma parte activa de una organización pedófila"
"No, señor. Nosotros somos españoles"
"Usted se atendrá, español o no, a la pena que merece"
Ese mismo día el director comercial de la compañía aérea, Antonio Cajal, aseguraba que los españoles se encontraban "incomunicados, en condiciones infrahumanas"; si bien, Exteriores comunicaba que estaban "en buen estado". Exteriores aseguraba que estaban bien y que el cónsul español en la zona ya estaba de camino para aumentar la presión diplomática.
En ese escenario, Francia y España ya trabajaban juntos; si bien, los galos se desvincularon de la ONG ya que aseguraban que fue una acción "ilegal". Sarkozy telefoneó a su colega chadiano, Idriss Deby, a quien manifestó su "tristeza" por este "lamentable asunto", según indicó el portavoz presidencial, que anticipó que el Gobierno galo había puesto en marcha una "célula de crisis" para seguir la situación, al frente de la cual se había situado la secretaria de Estado de Derechos Humanos, Rama Yade, quien calificó de "clandestina" la acción de la ONG.
Tres días después, 29 de octubre, las negociaciones francesas, recaídas directamente en el presidente galo, para liberar a los europeos empezaron a andar, días más tarde, el 4 de noviembre, el coordinador general de IU Gaspar Llamazares valoró dentro de la normalidad que Francia hubiera llevado el peso de las negociaciones diplomáticas al tratarse de un país francófono. En este sentido, fuentes del Exteriores afirmaron que España estaba al corriente de la actividad mediadora de Sarkozy y que guardó silencio por "prudencia".
El día 30 de octubre, la justicia chadiana inculpaba a los seis franceses de la ONG de secuestro de menores y estafa y de complicidad a los siete españoles de la tripulación y a los tres periodistas franceses. El 31, el cónsul de España en Camerún, Vicente Mas, se reunía con los españoles y el 1 de noviembre la ONU y el Comité Internacional de la Cruz Roja afirmaban que los menores no eran huérfanos y que 91 de los 103 niños -de edades entre uno y diez años- tienen al menos un familiar.
Un día después, 2 de noviembre, todos los detenidos fueron trasladados desde a Yamena después de que la Corte Suprema de Justicia trasladara la jurisdicción del caso a los tribunales de la capital chadiana. Ese día, y en menos de 48 horas, Nicolas Sarkozy telefoneó a su homólogo chadiano para decirle que desea que los "periodistas" y "la tripulación" sean liberados lo antes posible. El 4 de noviembre, el presidente francés Nicolás Sarkozy viajó a Yamena y tras entrevistarse con el mandatario africano logra la liberación de las cuatro azafatas españolas y de los tres periodistas franceses, a quienes traslada en su avión presidencial.