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La protesta de extrema izquierda en Barcelona se salda con diez agentes heridos

Diez agentes han resultado heridos en Barcelona al término de una marcha de extrema izquierda que concluyó con graves disturbios. En Madrid, la fuerte presencia policial y la actuación de los agentes, que requisaron 62 armas blancas, impidieron que se registraran incidentes. La CEP había alertado de que miembros de Batasuna-ETA participarían en las protestas de extrema izquierda. En Madrid, a la misma hora había prevista una protesta de ultraderechistas que finalmente no se ha celebrado.



Diez agentes han resultado heridos en Barcelona al término de una marcha de extrema izquierda que concluyó con graves disturbios. En Madrid, la fuerte presencia policial y la actuación de los agentes, que requisaron 62 armas blancas, impidieron que se registraran incidentes. La CEP había alertado de que miembros de Batasuna-ETA participarían en las protestas de extrema izquierda. En Madrid, a la misma hora había prevista una protesta de ultraderechistas que finalmente no se ha celebrado.
L D (Agencias) Varios cientos de personas, unas 2.000 según los convocantes y 500 según la Policía, han acudido a la concentración convocada a través de Internet por "Asambleas e individualidades antifascistas" en la Puerta del Sol, en repulsa por el asesinato de Carlos Palomino. En la Red de San Luis, a pocos metros en la confluencia de Gran Vía con Montera, donde Alianza Nacional (AN) había convocado otra concentración, en este caso contra la inmigración y no autorizada por la Delegación del Gobierno en Madrid, no se aprecia presencia de manifestantes.
 
En Sol, los asistentes portaron pancartas donde se podía leer, entre otras cosas, "Estado español, estado fascista", "Carlos asesinado por defender a la clase obrera", "Ninguna agresión sin respuesta" y "El fascismo avanza si no se le combate. Carlos presente". Los manifestantes, en su mayoría jóvenes, han pedido la ilegalización de los partidos ultras y oreado gritos como "ni nazis ni militares ni racistas en las calles" y "Carlos presente, ni olvido ni perdón".
 
Alrededor de ellos, que ocupan el entorno de la estatua ecuestre de Carlos III, había un gran despliegue policial, con numeroso presencia de antidisturbios y furgones de la Policía Nacional, que llega también a las calles aledañas. En la web lahaine.org se asegura que "cientos de manifestantes han sido retenidos por la policía en el metro y han sido enviados de vuelta, según varios testigos". También se indica que los "fascistas" convocados en la red de San Luis "no se atreven a agruparse y se mueven en grupitos de dos o tres personas".
 
La mayoría de los concentrados no ha querido hablar con los medios de comunicación porque cree que sus palabras van a ser "tergiversadas", aunque otros, como un joven que se identificado como J.C., sí han querido hablar. Este chico ha explicado a Efe que la policía había incautado sus dos "armas", dos porras que llevaba para defenderse, ha dicho.
 
Disturbios en Barcelona
 
Mientras, en Barcelona, un millar de jóvenes de extrema izquierda se han manifestado en el centro para condenar el asesinato de un joven en Madrid a manos de un grupo ultraderechista. La marcha, al contrario de lo ocurrido en Madrid, ha derivado en numerosos incidentes, en los que han resultado heridos varios mossos, según la policía catalana.

Los manifestantes partieron sobre las 18.00 horas de la plaza Universidad de Barcelona y se dirigieron a la plaza de Sant Jaume, en pleno centro de la capital catalana, custodiados por un amplio dispositivo policial. Según han informado a Efe los Mossos d'Esquadra, a lo largo del recorrido los jóvenes han realizado pintadas en fachadas, han cortado algunas calles con contenedores y han lanzado botellas a los agentes.
Diez agentes heridos

En los enfrentamientos entre policías y manifestantes, según las mismas fuentes, han resultado diez agentes de los Mossos d'Esquadra y siete manifestantes han sido detenidos. A la altura de la sede de Interior, en Via Laietana, fue donde los enfrentamientos fueron más violentos.
 
Los Mossos d'Esquadra informaron de que los manifestantes arrojaron botellas, piedras y "cualquier objeto" que encontraban, incluidas vallas de obras, contra la sede de Interior. Los manifestantes también incendiaron contenedores y los colocaron en medio de la calle.
 
Debido al lanzamiento de objetos, un mosso resultó herido con un corte en la cabeza y fue evacuado inconsciente a un hospital, y otros nueve resultaron heridos leves. Los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana detuvieron a siete personas por estos incidentes.
 

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