L D (Europa Press) Los cuatro apoderados de ANV en las Juntas Generales de Álava retrasaron esta mañana su entrada al pleno para no secundar el minuto de silencio que el resto de grupos guardó para recordar al guardia civil asesinado por ETA el pasado sábado en Francia, Raúl Centeno.
Después de la primera pregunta, el portavoz del grupo juntero popular, Javier de Andrés, solicitó al presidente de la Cámara foral, Juan Antonio Zárate, que leyera el comunicado aprobado el mismo día del atentado por los grupos del Congreso de los Diputados, en nombre de los grupos de la Cámara foral que apoyan el texto. En el mismo, se expresaba las condolencias y solidaridad a la familia del agente asesinado y se deseaba la recuperación de su compañero herido, además de condenar y rechazar "este nuevo crimen del terrorismo".
Según informó Javier de Andrés a Europa Press, en el momento de la lectura de la declaración, los junteros de ANV exhibieron carteles en los que reclamaban el respeto a los "derechos civiles y políticos", por lo que el presidente de la Cámara les llamó la atención.
En el turno de intervención del grupo abertzale y sobre una pregunta relacionada con la cárcel de Nanclares, el portavoz de ANV comenzó a denunciar la situación que sufren los presos de ETA encarcelados, por lo que el presidente de las Juntas le llamó al orden para que se atuviera al asunto de la pregunta. Al no atender las peticiones del presidente, tanto los apoderados populares como los socialistas se ausentaron de la Cámara.
Tras esta actuación de ANV, el portavoz del Grupo Popular en Juntas de Álava manifestó que no puede estar "decepcionado", ya que "nunca" ha tenido "ninguna esperanza" en ANV. "Era lo previsible, siguen el dictado de quienes mandan en su formación que es ETA, y eso es lo que han hecho hoy. En lugar de unirse a lo que es natural y normal en cualquier partido democrático, que es condenar un asesinato, lo que han hecho ha sido evitarlo, eludirlo y ensañarse con sus historias de siempre", afirmó de Andrés.
La Junta de Portavoces del Ayuntamiento de Hernani, gobernado por ANV, ha condenado el atentado de ETA en Francia y ha exigido la disolución de la banda terrorista, sin que la alcaldesa, Marian Beitialarrangoitia, acudiera a la reunión.
Los representantes del PSE, PNV, EA, EB-Aralar y PP se han reunido este mediodía tras participar en una concentración de protesta por el atentado y han aprobado un texto en el que condenan "con rotundidad" esta acción terrorista y se solidarizan con los familiares y amigos del guardia civil fallecido y del agente herido de extrema gravedad.
En su resolución, la Junta de Portavoces subraya que "quien atenta contra cualquier ciudadano, lo hace contra la propia sociedad vasca", y advierte de que "sólo quienes reconocen y aceptan que vivimos en una sociedad plural" y "respetan hasta sus últimas consecuencias todas las opciones políticas, sociales y culturales", "serán aceptados y reconocidos en el juego democrático".
Este texto, según ha informado el PSE/EE en un comunicado, ha sido aprobado por unanimidad, y posteriormente se ha aprobado otro sobre las detenciones de imputados en el sumario 18/98, seguido contra Ekin y otras organizaciones del entorno de ETA, que ha salido adelante con los votos de EA, PNV y EB-Aralar, y el rechazo de los socialistas y el PP, en el que se pide que el fallo sea revocado.