L D (Agencias) Así, el Comité Ejecutivo del Episcopado --formado por el presidente de la CEE y obispo de Bilbao, Ricardo Blázquez; su vicepresidente y cardenal arzobispo de Toledo, Antonio Cañizares; su secretario general, Juan Antonio Martínez Camino; y los siguientes miembros además de Rouco: el arzobispo de Sevilla, Carlos Amigo; el arzobispo de Barcelona, Lluís Martínez Sistach y el arzobispo de Oviedo, Carlos Osoro-- agradeció a la Archidiócesis de Madrid y a Rouco "por la acogida y la organización de la asamblea" y remitió a la alocución del cardenal emitida en la cadena COPE el pasado 2 de enero.
También remitieron los obispos, mediante una breve nota de prensa, a las palabras pronunciadas por el Papa Benedicto XVI durante la mencionada celebración, en la que agradecen al Santo Padre el haberse dirigido a los congregados "con iluminadoras palabras de estímulo para quienes trabajan en favor de la familia". Los prelados, que no responden a las últimas manifestaciones del Gobierno y del PSOE sobre los asuntos que les enfrentan, agradecieron también a las asociaciones y personas que prestaron su colaboración y a los "numerosísimos" fieles "que participaron en el extraordinario acontecimiento religioso con devoción, alegría y sin escatimar sacrificios".
Los obispos, que hacen "una valoración muy positiva del acto", concluyen su comunicado confiando en "el Señor bendecirá con abundantes frutos espirituales, pastorales y sociales esta celebración". En este sentido, destacan la cita de Benedicto XVI: "Vale la pena trabajar por la familia y el matrimonio, porque vale la pena trabajar por el ser humano, el ser más precioso creado por Dios".
Monseñor Rouco Varela destacó el pasado 2 de enero en declaraciones a la cadena COPE el papel de las familias, "protagonistas valientes y alegres" de la celebración. Además, resumió el significado de la celebración de la siguiente manera: "Las familias cristianas de España han querido ofrecer un testimonio público, festivamente expresado, de que en la experiencia cristiana de la familia se descubre, recibe y vive el gran don del Amor como primicia y vía imprescindible para vivir de amor y con amor en todas las circunstancias privadas y públicas de la vida y para andar la peregrinación de este mundo con esperanza. Porque 'amor saca amor', diría Teresa de Jesús".