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IGUAL QUE OBJETAR A LA MILI ENTRAÑÓ RIESGO DE CÁRCEL

El director de El Pilar dice que los padres "deben asumir las consecuencias" de objetar a EpC

 

VÍDEO LDTV: Albiac y Cañizares
 
LD (Víctor Gago)  El Colegio Nuestra Señora del Pilar de Madrid, cuna instructora de parte de la élite política española, acogió el pasado 23 de enero una tensa asamblea de padres interesados en conocer Educación para la Ciudadanía. El prestigioso centro marianista desaconseja la objeción de conciencia a la asignatura de adoctrinamiento. El director, reacio a que los padres se informasen, compraró el vacío legal sobre la objeción de conciencia a EpC con el que existía antes de la regulación de la objeción a la mili.
 
"Los padres objetores tienen que asumir que su decisión entraña riesgos y tiene consecuencias, de la misma forma que los objetores al Servicio Militar, cuando no estaba regulado su derecho, asumían el riesgo de ir a la cárcel", ha puntualizado Ignacio Zabala, director del centro, en declaraciones a Libertad Digital.
 
Unos 60 padres y madres asistieron el pasado 23 de enero a una sesión informativa sobre Educación para la Ciudadanía en el Colegio Nuestra Señora del Pilar de Madrid, que la Dirección del centro no vio con buenos ojos.
 
El colegio, regido por la congregación de los marianistas, desaconseja activamente la objeción de conciencia. La casa editorial de los marianistas, SM, produce el manual de referencia de la asignatura, escrito por el profesor José Antonio Marina. El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez, lo promocionó enarbolando un ejemplar en la tribuna del Congreso, el pasado 3 de julio.
 
En las primeras páginas del manual, Marina declara que el objetivo de EpC es formar a los "constructores" del "gran proyecto humano" que se corresponde con lo que el Estado prescribe como ciudadanía. El manual de los marianistas enseña, entre otras cosas, que "hay buenos y malos sentimientos, según cómo contribuyan al proyecto ético común".
 
El director, reticente al principio, cedió a la presión de los padres y les abrió una "sala bastante incómoda, que ni siquiera tenía calefacción", según han descrito a Libertad Digital dos asistentes a la asamblea.
 
Las mismas fuentes sostienen que los padres querían saber por qué el colegio no facilita el ejercicio del derecho constitucional a la objeción de conciencia, una opción que ya ha sido elegida por más de 21.000 familias que no desean que sus hijos sean adoctrinados en valores, sentimientos e ideología por el Estado.
 
"Tomó la palabra para señalar que aún no se ha regulado el derecho a la objeción de conciencia a Educación para la Ciudadanía, y que, por lo tanto, la situación es parecida a la que tenían los primeros objetores al servicio militar, cuando iban a la cárcel", dijo una asistente a la asamblea, y su testimonio ha sido ratificado por otro, igualmente consultado por LD.
 
Ignacio Zabala puntualiza esta versión, de la que afirma que "no coincide con los hechos".
 
Consultado por Libertad Digital, este jueves, el director del Colegio Nuestra del Pilar de Madrid explica que "lo que yo dije es que hay dos situaciones históricas que tienen algo en común, y es el hecho de que no está regulado el derecho a la objeción de conciencia a Educación para la Ciudadanía, como en su día tampoco lo estuvo el derecho a la objeción de conciencia al Servicio Militar. Y de la misma forma que los objetores de entonces asumían el riesgo de ir a la cárcel, los padres objetores a Educación para la Ciudadanía deben asumir que su decisión entraña riesgos y puede tener consecuencias, entre otras, que sus hijos no puedan presentarse a la Selectividad. Fue la constatación de un hecho, no una amenaza".
 
El director transmitió a los padres su opinión de que objetar a EpC es una expresión de desconfianza hacia el centro, de tradición católica, que considera suficientemente filtrados los contenidos más doctrinarios por el manual de la asignatura que se aplicará en sus aulas, el de José Antonio Marina para SM, y por los profesores seleccionados y entrenados por la congregación marianista.
 
Esta visión de una asignatura flexible y elástica coincide con la de la patronal de colegios católicos FERE-CECA, sumisa a la asignatura bajo la promesa informal de que sus contenidos pueden retocarse y adaptarse al ideario de los centros.
 
El director del Pilar ofreció a los padres, en un momento de la asamblea, la solución de presentar declaraciones de objeción "por solidaridad con los colegios públicos", según evocan dos de los asistentes a la asamblea consultados por este diario.
 
"Se trata de una opción inaceptable, ya que las familias no objetamos por solidaridad con los colegios públicos que no pueden adaptar la asignatura, sino porque queremos que la asignatura desaparezca del currículo para todos, por su enfoque adoctrinador", señalan.
 
Ignacio Zabala niega esta versión, en declaraciones a este diario. Según el director del centro: "Lo que les dije a los padres es que pusieran en su declaración de Objeción lo mismo que estaban exponiendo durante la asamblea, y es que aducían como causa de objeción el hecho de que los alumnos de los colegios públicos no pueden adaptar los contenidos de la asignatura a los valores en los que han sido educados en sus familias, como se hace en los colegios privados y concertados".
 
Sobre la queja de los padres de que en el prestigioso centro, origen de la instrucción de algunos líderes de la política y la economía nacional, no se facilita el ejercicio del derecho a la objeción, el director del Colegio Nuestra Señora del Pilar ha indicado a Libertad Digital que "es un hecho que no soy partidario de objetar, de acuerdo. Pero, si una familia desea hacerlo, yo no puedo impedirlo. Lo que les he dicho a los padres que se interesan por esa opción es. ¿Qué valor tiene hacerlo ahora, cuando la asignatura no se imparte aún en Madrid?".
 
Sobre la asignatura en sí, el director Ignacio Zabala opina que "el problema ideológico de la Educación no se resolverá suprimiéndola. Todo el mundo tiene que dar Ética, donde hay muchos contenidos ideológicos; lo mismo pasa en las asignaturas de Economía e Historia. Todo lo que puede decirse de esta asignatura, puede predicarse también de otras que ya están instaladas en el currículo de la Secundaria y el Bachillerato".
 
Se muestra escéptico con el crecimiento del movimiento cívico de objeción de conciencia. "Es como una manifestación, los organizadores siempre van a decir que hay una cifra mayor de manifestantes de la que conceden las autoridades. Pero, yo me pregunto, ¿es que está pasando algo anómalo en los colegios? ¿Es que acaso hay encierros de padres o manifestaciones a las puertas de los colegios? No, todo está transcurriendo con normalidad", dice a Libertad Digital el director del colegio Nuestra Señora del Pilar de Madrid.
 

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