LD (EFE) En una rueda de prensa celebrada en el Kremlin, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, declaró que "nuestro Estado Mayor militar considera que ese sistema amenaza nuestra seguridad nacional. Si éste aparece (cerca de las fronteras rusas), nos veremos obligados a tomar medidas adecuadas y a apuntar con parte de nuestros misiles a las instalaciones que nos amenazan". Según Putin, EEUU a la hora de planear la instalación de elementos de su escudo en Europa del Este ni siquiera consultó a la OTAN y solo inició conversaciones con la Alianza después de que Rusia se opusiera tajantemente al despliegue de ese sistema.
Putin precisó que sus palabras están directamente dirigidas contra la República Checa y Polonia, que pueden acoger elementos del escudo antimisiles de EEUU, como a Ucrania, cuyo Gobierno pide el ingreso del país en la OTAN. Al mismo tiempo, subrayó que Rusia no se propone "apuntar sus misiles sin necesidad extrema" y que en todo caso sería una "medida de respuesta" a los planes de Washington de instalar un radar en territorio checo y una base de cohetes interceptores en la vecina Polonia.
El jefe del Kremlin agregó que los gobiernos checo, polaco y ucraniano actúan sin siquiera consultar a sus pueblos, lo que en su opinión no tiene nada que ver con las "normas de la democracia". Indicó que "¿alguien ha preguntado a los checos y polacos si quieren esos sistemas? Que yo sepa, a la inmensa mayoría de los ciudadanos checos esos planes no les hacen ninguna ilusión".