LD (Pedro de Tena) En cualquier país o comunidad normal en la que hay dos ejes políticos vertebrales que representan al 90 por ciento de los votantes, lo natural, lo normal, lo lógico y lo adecuado es que en grandes temas esenciales para el futuro de la población ambos ejes confluyan hacia posiciones comunes que eviten, en lo posible, alteraciones o marchas atrás, rectificaciones o imposiciones. No es el estilo de gobernar del PSOE y mucho menos lo es de Manuel Chaves.
El desarrollo del Estatuto de Andalucía, clave jurídico-política de la Comunidad, es imprescindible y debe hacerse de mutuo acuerdo en cuanto a los márgenes y límites de su interpretación. En el Estatuto debe caber un Partido Socialista intervencionista, un Partido Popular menos intervencionista y más liberal y una IU casi estatizadora. Por tanto, ese desarrollo debe ser adecuado a estas circunstancias.
La presencia en la Unión Europa y la defensa de los intereses comunes de los andaluces en Europa deben ser abordados conjuntamente para encontrar puntos comunes y poner los intereses generales de la agricultura, de la ganadería, de la pesca y otros intereses por encima de los intereses partidistas. Lógico, absolutamente lógico y natural.
La Ley de Dependencia, que va a tener y debe tener gran repercusión social en la Comunidad donde hay centenares de miles de personas y miles de familias en tal situación, debe ser desarrollada y ejecutada de tal modo que si un día gobierna el PP no haya que rectificar más que matices o detalles, no lo fundamenta.
El Pacto Local, es decir, la transferencia de recursos y competencias a los Ayuntamientos, la administración más cercana para los andaluces y andaluzas, no debe tardar porque ya ha tardado 25 años, 25 años de "toreo" del PSOE al Estatuto de Andalucía. Pero el ritmo de su desarrollo puede ser acordado sin grandes traumas.
En cuanto a la renovación de las RTVA, que ha recibido 4 sanciones de la Junta Electoral Andaluza por su partidismo manifiesto, no puede esperar. Hasta ahora, los socialistas podían alcanzar la mayoría cualificada de tres quintos prevista en la Ley con el apoyo de los seis diputados de IU o los cinco del PA, pero en la nueva legislatura deberá contar necesariamente con el PP, ya que la suma de sus 56 escaños con los seis de IU alcanza a 62 diputados, a tres de los 65 necesarios para completar los tres quintos.
Pero el PSOE se ha asegurado, en la propia ley, la trampa. De no producirse el acuerdo, entonces la decisión se tomará por mayoría absoluta, es decir, por el PSOE. El texto aprobado en la Cámara autonómica sólo con los votos del PSOE establece que el director de la RTVA será elegido por mayoría cualificada de dos tercios del Parlamento en primera votación y, en caso de desacuerdo, habrá una segunda votación por mayoría de tres quintos. Si persiste el desacuerdo, una cláusula permite elegir por mayoría absoluta al máximo responsable del ente público.
Otros temas básicos
Aunque Manuel Chaves ha negado la crisis económica, tal crisis va a afectar, ya lo hace, al sector de la construcción amenazando con llevar a Andalucía al millón de parados si no se adoptan medidas inmediatas. El PSOE y el PP deberían acordar un plan conjunto para afrontar la crisis de la construcción porque en esa crisis está el futuro de muchas familias andaluzas.
Igualmente, la educación, en todos sus niveles desde los más bajos a la Formación Profesional y la enseñanza universitaria con su I+D+I, y la sanidad andaluzas no pueden seguir el camino que llevan y sería bueno un enfoque dialogante sobre sus reformas respectivas.
La pelota está en el tejado de Chaves.