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"NO MERECE NI CONSIDERACIÓN NI RESPETO"

Peces Barba dice que la sentencia del TSJA sobre EpC "va a durar menos que un pastel a la puerta de un colegio"

El ex presidente del Congreso de los Diputados Gregorio Peces Barba dijo este jueves que la sentencia del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Andalucía que permite la objeción de conciencia ante la asignatura de Educación para la Ciudadanía (EpC) "no se merece ninguna consideración, ni respeto". En este sentido, aseguró de que el Tribunal Supremo fallará a favor del recurso presentado contra ella, por lo que, dijo, "va durar menos que un pastel a la puerta de un colegio".

El ex presidente del Congreso de los Diputados Gregorio Peces Barba dijo este jueves que la sentencia del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Andalucía que permite la objeción de conciencia ante la asignatura de Educación para la Ciudadanía (EpC) "no se merece ninguna consideración, ni respeto". En este sentido, aseguró de que el Tribunal Supremo fallará a favor del recurso presentado contra ella, por lo que, dijo, "va durar menos que un pastel a la puerta de un colegio".
L D (Agencias) Peces Barba hizo estas declaraciones antes de iniciar una conferencia en el aula magna del Edificio Histórico de la Universidad de Oviedo sobre el Estado laico. Preguntado por la supuesta disparidad de criterios al respecto entre el Tribunal Superior de Asturias y el de Andalucía, el jurista negó la máxima. "No hay ninguna disparidad, lo que hay son muchos tribunales que han dicho lo que tienen que decir, y una sentencia que es verdaderamente inconcebible, que es la del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, que no va aguantar ningún recurso", aseveró.
 
Desde su punto de vista, "no se puede sostener la tesis de que existe  un derecho directo a la objeción de conciencia. Si cada uno pudiera decir: 'esto lo obedezco porque estoy de acuerdo, y esto no lo obedezco porque no estoy de acuerdo', volveríamos al estado de naturaleza", explicó.
 
Señaló además que el fallo "no menciona al artículo núcleo del asunto, el 27.2 de la Constitución ('La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana en el respeto a los principios democráticos de convivencia y a los derechos y libertades fundamentales'), por lo que no merece consideración ninguna ni respeto". "Va durar menos que un pastel a la puerta de colegio", aseguró, recordando que "es inevitable" que el Tribunal Supremo la anule.
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