LD (V. Gago) El economista, el estudioso, el estadista, el maestro, el infatigable animador. "Un ganador en todas las tareas que realizó", dijo de él este jueves José Barea, su discípulo más orgulloso. Enrique Fuentes Quintana sigue vivo como fuente de doctrina y como ejemplo de probidad intelectual.
El homenaje que este jueves le ha tributado el Instituto de Censores Jurados de Cuentas ha permitido rescatar un documento audiovisual de enorme valor histórico y doctrinal.
(Fotos: F.K. / Cortesía del Instituto de Censores Jurados)
Se trata del discurso de 16 minutos que Fuentes Quintana dirigió a la nación en 1977, a través de TVE, sobre la urgencia de las reformas económicas y la necesidad de un gran acuerdo de estabilidad, que acabaría plasmándose en los Pactos de La Moncloa.
Su análisis de la situación económica del país y su prescripción de rigor presupuestario y libertad económica y de mercado con intervenciones puntuales del Estado contienen lo esencial de su método y de su pensamiento.
Junto a una visión del equilibrio de la economía, que para el profesor Fuentes debía arraigar en la austeridad del sector público y resulta plenamente vigente treinta años después, su doctrina incluye algunos arbitrios intervencionistas frente a lo que Fuentes llama en esta conferencia televisada "aberraciones del mercado".
Es La hora de la Economía, proclamó el maestro. Su análisis conserva una inequívoca vigencia en la antesala de una nueva crisis económica en España. VEA AQUÍ el vídeo con la lección del profesor Fuentes Quintana en TVE, año 1977.
El auditorio del Museo Nacional Reina Sofía acogió este jueves un homenaje del Instituto de Censores Jurados de Cuentas a Enrique Fuentes Quintana. En presencia de su familia, el profesor José Barea y el ex gobernador del Banco de España, José Ramón Álvarez Rendueles, glosaron la figura del maestro y evocaron su vivencia junto a él.
Fuentes Quintana fue miembro de honor del Instituto de Censores Jurados de Cuentas de España, al que ingresó en 1978 con una lección magistral sobre La información económica como base de la política económica, cuya tesis irradia una indiscutible vigencia sobre la actualidad española y mundial.
Fuentes persuadió a los auditores, entonces, de la conveniencia de practicar las reformas necesarias en su profesión para llegar a "ofrecer una imagen fiel de la empresa y el empresario que eviten, con la presencia del dato claro, la crítica irresponsable que se ha acumulado sobre quién es intérprete de la vida económica en Occidente y que permitan, en fin, definir una política económica clara frente a la empresa".
Aquella conferencia de ingreso tuvo lugar, hace treinta años, en el salón de actos del Banco de España, siendo gobernador José Ramón Álvarez Rendueles, uno de los discípulos del profesor Fuentes Quintana.
Álvarez Rendueles evocó su primer contacto con Enrique Fuentes Quintana, como alumno de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Complutense, a principios de los 60.
"Se celebraban ese año elecciones presidenciales en Estados Unidos, y el profesor Fuentes Quintana expuso en clase un análisis de los programas económicos de los dos candidatos, Kennedy y Nixon", dijo el ex gobernador del Banco central durante su intervención en el homenaje.
Para José Barea, hablar de su maestro "es el más alto honor que en mi vida he tenido", dijo este jueves. Barea transmitió un mensaje de reconocimiento y afecto de otro maestro, Juan Velarde, que no pudo asistir por encontrarse en Oviedo, invitado a los actos conmemorativos del 400 aniversario de la creación de su Universidad.
"Fue un ganador en todas las tareas que realizó", señaló Barea.
"Como profesor, los alumnos elogiaban los esquemas que exponía. Como director del Instituto de Estudios Fiscales, elevó su nivel científico a cotas impensables y creó su revista. Como presidente de la Fundación de las Cajas de Ahorros, creó un centro de investigación que pronto adquirió renombre internacional, siendo Papeles de Economía, la revista que impulsó en el seno de la Fundación, la publicación más importante de temas económicos de nuestro país. Como presidente de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, hay un antes y un después del profesor Enrique Fuentes Quintana,...", enumeró el profesor Barea algunas de los hitos de la trayectoria intelectual de su maestro.
El periodista Fernando González Urbaneja, maestro de cremonia, destacó el "factor humano" como un elemento clave del éxito de la Transición española. Tan determinante como los caracteres del Rey y de Adolfo Suárez para el éxito de las reformas políticas, fue "el factor humano de la presencia de Enrique Fuentes Quintana" para el éxito de las reformas económicas que desembocaron en el Pacto de Estabilidad de 1978.
"Los Pactos de la Moncloa fueron posibles porque estuvieron quienes estaban. El profesor Fuentes tenía el libreto, con letra y música. Y tenía, además, el factor humano", un liderazgo intelectual y una autoridad moral que "no debemos perder de vista" porque "fue determinante", dijo el presidente de la Asociación de la Prensa de Madrid.