(Libertad Digital) El informe realizado por el Tribunal de Cuentas desvela grandes irregularidades en el Ministerio de Cultura durante 2004, primer año del Ejecutivo socialista. Estas anomalías se centran en el pago tardío de intereses, falta de documentación, la compra de piezas falsas así como la adjudicación de contratos de obras, entre otras cosas.
En este sentido, desde el Ministerio justificaron esta serie de problemas debido a la falta de personal aunque son muy numerosas las deficiencias desveladas por el Tribunal de Cuentas. Sin embargo, el elemento más destacable es el de la compra de piezas falsas y como ejemplo el diario de Vocento habla de la adquisición de varias piezas en una subasta de París. Estos supuestos muebles de época costaron más de 45.000 euros aunque las autoridades de Cultura estaban dispuestas a pagar 180.000 euros por ellos. Una vez llegados a su destino, el Museo de Ámerica, que no sabía nada de esta compra, cuestionó su autenticidad aunque desde la Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales les instaron a demostrarlo, lo cual hicieron. Por tanto, al devolverlo se vieron obligados pagar otros 9.158 euros de transporte. Todo un "chollo".