LD (Agencias) A juicio de Corbacho, "si el crecimiento de la economía se va reduciendo y se va ajustando" es probable que "tenga una afectación sobre determinados sectores que ya se está notando, como en el caso de la construcción".
Los planes de futuro tienen que tener el objetivo, según Corbacho, de "dinamizar sobre todo a través de la formación y hacer de puente para que las personas que hayan podido perder un empleo en un sector como la construcción puedan encontrar una actividad en otro sector".
En cualquier caso ha señalado que al ser inmigrantes "el grueso mayoritario de los trabajadores del sector de la construcción" será uno de los colectivos "más afectados" por la caída del empleo.
Los planes de futuro tienen que tener el objetivo, según Corbacho, de "dinamizar sobre todo a través de la formación y hacer de puente para que las personas que hayan podido perder un empleo en un sector como la construcción puedan encontrar una actividad en otro sector".
En cualquier caso ha señalado que al ser inmigrantes "el grueso mayoritario de los trabajadores del sector de la construcción" será uno de los colectivos "más afectados" por la caída del empleo.
Pese a ello, Corbacho aseguró que los ciudadanos deben tener "cierta tranquilidad", pues el sistema de protección español es lo suficientemente amplio como para garantizar que "quien se caiga del mismo, no llegará directamente al suelo". "Hemos tejido una red de protección que es el Estado de Bienestar para que esto no ocurra, pero eso no puede conformarnos", añadió.
Corbacho admitió que "se avecinan momentos de dificultad" en materia de empleo, pero también "de oportunidad". "España es un país rico en inteligencia, sabiduría y oportunidades y estoy convencido de que el Gobierno impulsará políticas para poner en valor las oportunidades y que algunos de los empleos que se puedan destruir por la coyuntura puedan ser recolocados en nuevos yacimientos", afirmó.
En este sentido, indicó que la política de empleo debe tener como horizonte el diálogo social, pero también territorial, pues, según dijo, "no se puede ignorar la fuerte descentralización del Estado" y las competencias que tienen asumidas los ayuntamientos y las comunidades autónomas.
Así, animó a las tres administraciones (la local, la autonómica y la estatal) a unir "sinergias" para trabajar conjuntamente en el objetivo de dinamizar el mercado laboral y lograr que se destruya el menor número de puestos de trabajo posible. "El diálogo social y territorial y las políticas económicas impulsadas por el Gobierno y especialmente por el vicepresidente segundo serán la mejor respuesta a los problemas", apuntó.
Más gasto público en prestaciones al desempleo
Por su parte, el secretario general de Empleo, Antonio González, subrayó hoy que si la evolución que en los dos primeros meses han experimentado las prestaciones por desempleo se mantiene hasta final de año, el gasto total en desempleo podría superar el previsto inicialmente y cerrar el ejercicio con un crecimiento cercano o incluso superior al 13%.
González, que asistió a la toma de posesión de los secretarios de Estado de la Seguridad Social y de Inmigración y Emigración, Octavio Granado y Consuelo Rumí, precisó en todo caso que la evolución del desempleo y, por tanto de los gastos que conlleva el pago de prestaciones, corresponde proyectarla al Ministerio de Economía y Hacienda, que precisamente se encuentra ahora trabajando en la revisión de las grandes cifras macroeconómicas.
De momento, el vicepresidente económico, Pedro Solbes, ya ha avanzado que la tasa de paro podría repuntar en los dos próximos años desde el 8,6% actual hasta el 9% o incluso el 10% en el escenario más negativo, debido a la desaceleración en la que está inmersa la economía española. Solbes también ha dicho que esta situación afectará al superávit al aumentar los gastos de protección asociados a un incremento del desempleo.
Los cálculos de Trabajo sobre lo que podría crecer el gasto en desempleo tienen en cuenta además que las entradas que se están produciendo actualmente en el sistema de protección contributivo han generado derechos para cobrar la prestación durante más tiempo y por una mayor cuantía, ya que la base sobre la que se calcula la ayuda es más elevada.
González, que podría repetir en el cargo una vez que el nuevo ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, le confirme su continuidad, explicó además que si se incrementa el gasto en desempleo no habrá problemas presupuestarios, pues se pueden ampliar los créditos iniciales sin límite alguno.
Inicialmente, y según consta en los presupuestos presentados por Trabajo, el gasto en protección por desempleo alcanzará este año los 15.506 millones de euros, un 9% más que en 2007.
El pasado mes de enero, los servicios públicos de empleo (antiguo Inem) destinaron 1.537 millones de euros al pago de prestaciones por desempleo, un 18,1% más, mientras que en febrero gastaron por el mismo concepto un total de 1.526 millones de euros, con un crecimiento del 20,9%. Por su parte, los beneficiarios de estas ayudas aumentaron un 12,8% en el primer mes del ejercicio y un 14% en el segundo.