(Libertad Digital) Ciutadans recuerda que el artículo del director general de Air Berlin desencadenó "una serie de reacciones desproporcionadas e improcedentes desde asociaciones catalanas sostenidas con fondos públicos y desde la propia Administración catalana a través del delegado de la Generalitat de Cataluña en Alemania, Sr. Martí Estruch".
La respuesta de la Plataforma per la Llengua no le sorprende ya que "fiel a su trayectoria, ha optado por la coacción, promoviendo un boicot a la empresa privada Air Berlin, similar a los que tantas veces ha organizado en los últimos años en contra de todas las empresas que no etiqueten o anuncien o usen como lengua preferente el catalán. Valga repetir de nuevo que dicha entidad ha recibido repetidas subvenciones de la Administración catalana y suscrito acuerdos de colaboración con ésta, como el reciente con el Departamento de Acción para conminar a los ciudadanos a hablar a los inmigrantes sólo en catalán".
Pero para Ciutadans, "los hechos más reprobables" han procedido del propio Gobierno de la Generalidad, que a través de su representante en Alemania, Martín Estruch, han apoyado "implícitamente" las "actitudes como la de la propia Plataforma o la del ex parlamentario de ERC, Joan Puig". Es por ello que piden al Gobierno de Montilla "no interferir en aquellos asuntos que conciernen a otras comunidades autónomas en sus relaciones con los ciudadanos o empresas residentes en aquellas y cesar al Sr. Marti Estruch de su puesto como Delegado del Gobierno de la Generalitat en Alemania por manifiesta incapacidad para el ejercicio de su cargo".
Y es que recuerda Ciutadans que "el Sr. Martín Estruch, como representante máximo de la Administración catalana en Alemania, tiene como una de sus funciones, tal y como establece el artículo 2.b) del Decreto 51/2008, de 11 de marzo, de creación de la Delegación del Gobierno de Cataluña en Alemania, facilitar las relaciones bilaterales con las autoridades alemanas en el ámbito de las competencias de la Generalitat".
"A pesar de esto, el Delegado de la Generalitat en Alemania ha dirigido una queja formal a la empresa alemana que difícilmente casa con su objetivo como puente entre Cataluña y Alemania. En ella, el Sr. Martín Estruch acusa al director de Air Berlin de menospreciar la lengua catalana y le amenaza con la posibilidad de perder el mercado potencial catalán debido a sus posicionamientos. El delegado en Alemania adopta así de manera indirecta tanto el mensaje como el tono de las plataformas y personas mencionadas, dando peso institucional a lo que debería quedar en una serie de declaraciones desafortunadas y entorpeciendo las relaciones entre el Gobierno de Cataluña y las empresas alemanas, actitud que puede tener, como el propio Sr. Estruch insinúa, consecuencias comerciales".
Círculo Balear critica "la tibieza y ambigüedad" del PP
Por su parte, Círculo Balear ha emitido este martes un comunicado en el que informa de que está recibiendo "cientos de adhesiones", a la campaña de apoyo a Air Berlin, que traslada a la compañía. Sin embargo, también "se están recogiendo preocupantes comentarios de residentes alemanes y turistas habituales de las islas, en los que se refleja el temor por parte de este importante colectivo a que ésta no sea sino una campaña perfectamente orquestada del Govern para echar de aquí a los residentes extranjeros y evitar que entren más turistas en la isla".
Desde Círculo Balear también se critica que el Gobierno Balear, presidido por el socialista Francesc Antich, "no ha tomado ninguna medida de apoyo a una compañía que conecta con el principal cliente turístico de Baleares, Alemania, sino todo lo contrario: considera correcto instar a Air Berlin a utilizar el catalán en sus comunicaciones, incluso solicitar a sus socios de Gobierno declarar empresa non grata a la principal compañía aérea que opera en Baleares".
Además, Círculo Balear ha criticado la "tibia y ambigua respuesta de la dirección actual del PP balear, con la excepción del alcalde de Calviá" que no hace sino "ratificar el divorcio existente entre la clase política y los ciudadanos".