LD (Pablo Montesinos) Las víctimas del terrorismo están rotas por el dolor. La hermana de uno de los doce guardias civiles que De Juana asesinó en la plaza República Dominicana de Madrid, Manuela Lancharro, no ha podido evitar el sollozo al ser preguntada por la excarcelación del terrorista.
"No tengo palabras, estoy como si me hubieran arrancando el corazón, realmente mal", asegura. Pero no sólo ella, también toda su familia: "Estamos sin poder poner la tele, el verle sonreír te hace ponerte peor, hace que te hundas".
Con esa franqueza que caracteriza a las víctimas del terrorismo, Lancharro exige a Rodríguez Zapatero, de una vez por todas, que actúe contra los asesinos. Duda de que haya hecho todo lo posible: "O no ha podido o no ha querido, pero De Juana está en la calle". Por ello, insta a quien corresponda a que actúe y devuelva al asesino a la cárcel.
Preguntada por cómo se ha sentido ante el respaldo de cientos de ciudadanos en el acto de la madrileña plaza República Dominicana de Madrid, Lancharro responde: "Lo más emocionante ha sido cuando me he encontrado un ramo de flores con la foto de mi hermano, no sé quien ha sido, pero le doy las gracias de todo corazón, con toda mi alma".
García Casquero: "Indignación, dolor, impotencia y rabia"
También en declaraciones a Libertad Digital, García Casquero ha reconocido que los actos celebrados por toda España en homenaje a los 25 asesinados por De Juana han estado marcados por "la indignación, el dolor, la impotencia y la rabia". "No se han podido evitar las lágrimas", nos advierte.
Además, insta a Rodríguez Zapatero a no cometer los errores de la pasada legislatura, cuando dio "beneficios a ETA". "No deberían de haber existido jamás", recalca. Además, pide al Gobierno que legisle y obligue a los miembros de ETA a cumplir la ley "íntegramente".
"No comprendemos cómo De Juana ha podido salir de la cárcel", ha insistido, para después añadir: "Se podía haber hecho algo más".
Clamor contra De Juana
En toda la geografía española se han vivido actos de homenaje a las víctimas, en mayor o menor medida. El más significativo se ha celebrado en Madrid, en el lugar donde De Juana sesgaba la vida de doce jóvenes guardias civiles. Allí, centeneras de ciudadanos han querido demostrar su repulsa contra el sanguinario terrorista. Se han depositado 25 ramos de flores, uno por cada víctima.
En San Sebastián, Dignidad y Justicia convocó una concentración en los jardines de Alderdi Eder a las 12.00 horas, a la que manifestaron su adhesión numerosos colectivos de víctimas como Covite o el Foro de Ermua.
Por su parte, en Ávila, una treintena de personas, portando velas y banderas de España, se concentró en el Mercado Chico. Durante el acto, convocado por la Asociación Abulense de Amigos de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, se dio lectura al nombre de las 25 por quienes se guardó un minuto de silencio y a las que también se recordó mediante la colocación simbólica de dos velas sobre una bandera ante las puertas del edificio consistorial. "Es una puñalada trapera a las víctimas de este sanguinario asesino", aclaró con pesar Alejandro Carrera, el presidente de la asociación, quien lamentó también que "nueve meses de cárcel es el precio de la vida de un español".