L D (EFE) Alonso ha recorrido a pie los más de 5,4 kilómetros de los que consta el circuito que discurre por las inmediaciones del Puerto de Valencia acompañado de sus ingenieros de pista para conocer las particularidades de un circuito que se estrena esta temporada. "He tenido muy buena sensación. Lo conocía por vídeos, de las carreras de hace un mes -de GT y F3-, de los planos que tenía, pero caminando y viéndolo in situ he confirmado la idea que tenía", ha dicho Alonso, que asegura que es "difícil denominarlo urbano, es un semi-permanente normal y corriente, pero con las vallas pegadas en las rectas. Es el polo opuesto a Mónaco".
Así, Alonso insiste en que Valencia es "diferente a Mónaco o a lo que será Singapur" -que esta temporada se estrena también en la Fórmula Uno en una carrera nocturna- o cualquier circuito urbano, y agrega que el Gran Premio de Europa "está por encima de esa calidad". En su explicación técnica, Alonso también comentaba que "hay tramos ciegos, pero en teoría las banderas amarillas tendrían que ayudar en caso de que en una curva que no pudieras ver a la salida si hay alguien parado". "Del mismo modo -continuaba-, hay partes que se estrechan bastante, como la zona del puente, pero son los riesgos y trampas que tiene todo circuito urbano. Mónaco no permite ningún error y Valencia pese a ser más ancho, menos bacheado y estar todo más calculado, no va a permitir tampoco errores. Esa es la salsa de los circuitos urbano".
El piloto español asegura que le gustan este tipo de circuitos, pero para conocer si Valencia le divierte o no se deberá esperar a este viernes, día del primer contacto con la pista en los primeros entrenamientos libres. "A trescientos kilómetros por hora va a cambiar mucho respecto a las sensaciones al caminarlo hoy. Se va a volver todo más estrecho y más difícil, pero así, a priori, es de esos circuitos que te gustan, bien preparado, todo calculado, a estrenar, todo nuevo", manifestaba Alonso. "De hecho -proseguía-, hay curvas que ahora piensas que son de una manera y luego te subes al coche y algunas partes no tienen nada que ver con lo que habías programado. Cuando te subas seguro que hay sorpresas, pero lo más importante es aprovechar las tres horas que tendremos de entrenamiento para dar el mayor número de vueltas para tener más confianza".
También se mostraba satisfecho por el hecho de que España tenga en la actualidad dos grandes premios y, aunque dijo desconocer la incidencia que podría haber tenido sus dos títulos mundiales, si que destacó la pasión de la afición española por la Fórmula Uno. "Está claro que España está al frente de automovilismo y otros deportes. La afición que se ve tanto en Barcelona como en Valencia yo no la veo en ningún sitio en todo el Mundial, ya que está volcada con este deporte, disfruta del gran premio y todos estamos contentos por correr aquí", añade.
Y ha explicado que, como muestra de la fidelidad de la afición española, destacan los test que se hacen en invierno y que se reparten en Valencia, Jerez y Cataluña. "Ver a tanta gente en los entrenamientos es una sensación increíble buena para la Fórmula Uno. Dos grandes premios en España es una justa recompensa por lo que se ha volcado España con este deporte", concluyó.
Así, Alonso insiste en que Valencia es "diferente a Mónaco o a lo que será Singapur" -que esta temporada se estrena también en la Fórmula Uno en una carrera nocturna- o cualquier circuito urbano, y agrega que el Gran Premio de Europa "está por encima de esa calidad". En su explicación técnica, Alonso también comentaba que "hay tramos ciegos, pero en teoría las banderas amarillas tendrían que ayudar en caso de que en una curva que no pudieras ver a la salida si hay alguien parado". "Del mismo modo -continuaba-, hay partes que se estrechan bastante, como la zona del puente, pero son los riesgos y trampas que tiene todo circuito urbano. Mónaco no permite ningún error y Valencia pese a ser más ancho, menos bacheado y estar todo más calculado, no va a permitir tampoco errores. Esa es la salsa de los circuitos urbano".
El piloto español asegura que le gustan este tipo de circuitos, pero para conocer si Valencia le divierte o no se deberá esperar a este viernes, día del primer contacto con la pista en los primeros entrenamientos libres. "A trescientos kilómetros por hora va a cambiar mucho respecto a las sensaciones al caminarlo hoy. Se va a volver todo más estrecho y más difícil, pero así, a priori, es de esos circuitos que te gustan, bien preparado, todo calculado, a estrenar, todo nuevo", manifestaba Alonso. "De hecho -proseguía-, hay curvas que ahora piensas que son de una manera y luego te subes al coche y algunas partes no tienen nada que ver con lo que habías programado. Cuando te subas seguro que hay sorpresas, pero lo más importante es aprovechar las tres horas que tendremos de entrenamiento para dar el mayor número de vueltas para tener más confianza".
También se mostraba satisfecho por el hecho de que España tenga en la actualidad dos grandes premios y, aunque dijo desconocer la incidencia que podría haber tenido sus dos títulos mundiales, si que destacó la pasión de la afición española por la Fórmula Uno. "Está claro que España está al frente de automovilismo y otros deportes. La afición que se ve tanto en Barcelona como en Valencia yo no la veo en ningún sitio en todo el Mundial, ya que está volcada con este deporte, disfruta del gran premio y todos estamos contentos por correr aquí", añade.
Y ha explicado que, como muestra de la fidelidad de la afición española, destacan los test que se hacen en invierno y que se reparten en Valencia, Jerez y Cataluña. "Ver a tanta gente en los entrenamientos es una sensación increíble buena para la Fórmula Uno. Dos grandes premios en España es una justa recompensa por lo que se ha volcado España con este deporte", concluyó.