L D (EFE) El ministro explicó que de los 3.096 aficionados que viajaron a Roma para ver el encuentro, 800 tienen antecedentes penales y 27 están vinculados a la mafia local, la Camorra.
Asimismo, añadió que 206 hinchas identificados se encuentran en los registros de la policía al haber sido vistos en compañía de personas relacionadas con asociaciones mafiosas. "La presencia de un número tan elevado de personas con antecedentes criminales o pertenecientes o relacionados con la Camorra constituye un nuevo factor de riesgo y un multiplicador de la violencia en el fútbol", añadió.
El máximo responsable de la Policía italiana, Antonio Manganelli, había expresado hace unos días su convencimiento de que existe "una influencia de la criminalidad organizada" en los incidentes que protagonizaron algunos seguidores del Nápoles. Maroni constató que Giuseppe Misso, mafioso arrepentido y que colabora ahora con la Justicia, habló en uno de los interrogatorios de la "influencia de la Camorra en algunas franjas de la afición napolitana".
Ante estos incidentes, se prohibió a los grupos de seguidores organizados del Nápoles viajar para seguir a su equipo en los partidos fuera de casa hasta el final del campeonato, y se decretó el cierre de las Curvas A y B (fondo norte y sur) del estadio del San Paolo hasta el 31 de octubre.
El titular de Interior anunció además "tolerancia cero" ante posibles nuevos casos de violencia entre los aficionados y aseguró que se prohibirán los viajes durante todo el campeonato de los hinchas que provoquen incidentes. Asimismo, indicó que el Ministerio del Interior podrá prohibir los viajes de los aficionados en el caso de los partidos que sean considerados de alto riesgo.