L D (Europa Press) Mariano Fernández Bermejo ve "difícilmente entendible" la actitud de los jueces del Tribunal Supremo que hace unos días firmaron un escrito contra la "intromisión" del Gobierno y su "intolerable presión" en su labor, ya que, explica, "cualquiera puede interpretar" que esa carta "también es una injerencia en la actividad del Poder Judicial". "Hay un matiz en la actitud del Supremo que me resulta difícilmente entendible y es que practique lo que critica", afirma Bermejo en una entrevista al diario El País , recogida por Europa Press .
Los jueces del alto tribunal firmaron el escrito en respuesta a las críticas del Ejecutivo, que consideraba "escasa" la sanción de 1.500 euros impuesta al juez Rafael Tirado , el magistrado que no envió a prisión al presunto asesino de la niña Mari Luz Cortés, pese a la existencia de una condena en firme.
El ministro defiende que "las resoluciones del órgano de Gobierno de los jueces son tan criticables" como las suyas. " Creo que estamos todos en el derecho y en la obligación de hacer esa crítica ", afirma.
El titular de Justicia también critica la huelga que el pasado lunes protagonizaron los secretarios judiciales, y que apoyaron jueces de toda España, en defensa de la secretaria del juzgado de Tirado, sancionada con dos años de inhabilitación. En opinión de Bermejo, es "insólito" que se produzca "un paro alegando la necesidad de reformar la justicia", cuando esto está "en el programa y entre las prioridades" del Gobierno, que ha aumentado "en cinco años más del 50% el presupuesto del Departamento.
Asimismo, Bermejo defiende que lo que ocurrió con el asesino de la niña onubense fue producto de "una larga cadena de errores y negligencias" y niega que se deba a la falta de medios, porque si fuera así "tendríamos casos como éste todos los días". "No negamos que existan déficits, pero no tanto de medios personales y materiales, como se dice, sino de orden", apostilla.
Los jueces del alto tribunal firmaron el escrito en respuesta a las críticas del Ejecutivo, que consideraba "escasa" la sanción de 1.500 euros impuesta al juez Rafael Tirado , el magistrado que no envió a prisión al presunto asesino de la niña Mari Luz Cortés, pese a la existencia de una condena en firme.
El ministro defiende que "las resoluciones del órgano de Gobierno de los jueces son tan criticables" como las suyas. " Creo que estamos todos en el derecho y en la obligación de hacer esa crítica ", afirma.
El titular de Justicia también critica la huelga que el pasado lunes protagonizaron los secretarios judiciales, y que apoyaron jueces de toda España, en defensa de la secretaria del juzgado de Tirado, sancionada con dos años de inhabilitación. En opinión de Bermejo, es "insólito" que se produzca "un paro alegando la necesidad de reformar la justicia", cuando esto está "en el programa y entre las prioridades" del Gobierno, que ha aumentado "en cinco años más del 50% el presupuesto del Departamento.
Asimismo, Bermejo defiende que lo que ocurrió con el asesino de la niña onubense fue producto de "una larga cadena de errores y negligencias" y niega que se deba a la falta de medios, porque si fuera así "tendríamos casos como éste todos los días". "No negamos que existan déficits, pero no tanto de medios personales y materiales, como se dice, sino de orden", apostilla.